El presidente del Banco Central de Costa Rica (BCCR), Róger Madrigal López, hizo un llamado a la prudencia a los diputados sobre la tramitación del proyecto de ley que pretende eliminar el uso de dinero en efectivo como método de pago en los servicios públicos costarricenses.
El proyecto que fue presentado por el Ejecutivo en mayo pasado, instruye a las instituciones públicas para que estas determinen el establecimiento de cambio hacia la digitalización en el pago de los servicios públicos. Se espera que el salto a la digitalización de los pagos se lleve a cabo en un plazo de 5 años.
En este sentido, el presidente del BCCR en una audiencia sostenida con los diputados que integran la Comisión de Asuntos Económicos de la Asamblea Legislativa, expresó que el plan va en correspondencia con los esfuerzos para mejorar la inclusión financiera de los sectores más desprotegidos, con las tendencias de digitalización y con la recolección de los datos sobre la demanda de los servicios básicos.
Pero estima que es necesario tomar en consideración varios asuntos, entres estos que el Estado no puede repudiar el uso del efectivo y que la legislación actual no permite obligar a los ciudadanos a pagar solamente a través de un sistema electrónico.
Asimismo, el economista sugirió tener mayor claridad en el texto (iniciativa de ley) acerca de la cobertura del proyecto, dado que él estima que la iniciativa habla en términos muy generales al referirse a servicios públicos. Y señaló que hay que revisar el asunto de los 5 años de gradualidad que estima la propuesta, ya que podría ser un período corto para implementar algunos servicios.
Otra de las sugerencias fue que se debe tener cuidado con el tema de las sanciones para las entidades que no se acojan a esta modalidad, porque “un proyecto omiso en sanciones es letra muerta”, afirmó.
Aunque Madrigal, aclaró que su postura no representa la voz de la junta directiva del BCCR, sino únicamente la de él como presidente de la entidad.