El cuestionado expresidente panameño Juan Carlos Varela es el último personaje de la vida pública de ese país que aparece en las listas de aspirantes al Parlamento Centroamericano, en medio de un debate cada vez más intenso para retirar a Panamá del organismo regional.
Varela, quien enfrenta procesos judiciales por su vinculación al caso Odebrecht y a los llamados “Papeles de Pandora”, aparentemente se postulará por el Partido Panameñista, generando una ola de críticas de la clase política y la sociedad civil del país.
El candidato del partido, José Isabel Blandón, no negó ni confirmó la postulación, solo afirmó en una entrevista radial que Varela cumplía los requisitos para ser candidato.
En julio pasado, Estados Unidos declaró ”inelegible” de ingresar a su territorio a Varela “debido a su participación en actos de corrupción significativa al aceptar sobornos a cambio de otorgar inapropiadamente contratos de gobierno cuando fungía como presidente y vicepresidente”.
Además, en 2019, medios panameños revelaron informaciones sobre presuntos pagos por unos 142 millones de dólares por parte de China a Varela para que rompiera relaciones diplomáticas con Taiwán y las estableciera con Pekín el 13 de junio de 2017.
Pero Varela no es el único personaje cuestionado que se integra al Parlacen en Panamá.
En agosto, los hermanos Ricardo Alberto y Luis Enrique Martinelli, hijos del expresidente Ricardo Martinelli (2009-2014), quienes son imputados en esta trama de blanqueo de capitales, fueron juramentados como diputados del Parlacen en una movida que parece haber contado con el apoyo de la dictadura de Daniel Ortega.
Los hermanos Martinelli buscaban desesperadamente ser juramentados para evitar su enjuiciamiento en el llamado caso “Blue Apple”, por cargos de blanqueo de capitales, corrupción de servidores públicos y asociación ilícita.
Según la investigación, la sociedad anónima Blue Apple habría sido utilizada para ocultar y blanquear dinero supuestamente obtenido de sobornos y coimas relacionados con contratos estatales otorgados a empresas constructoras entre 2011 y 2014, sumando más de 82 millones en blanqueo de capitales.
Buscan salir del Parlacen
Ricardo Lombana, candidato presidencial del Movimiento Otro Camino, que buscaba una alianza con el partido Panameñista, se distanció de este último instituto político precisamente por Varela.
“No vamos a postular al señor Juan Carlos Varela al Parlacen para que vaya a refugiarse de las investigaciones que tiene”, dijo Lombana.
“La población no quiere que se siga utilizando el Parlacen, Nosotros nos vamos a salir del Parlacen y ya tenemos el mecanismo para hacerlo”, prometió el aspirante presidencial.
Desde agosto hay un intenso movimiento para sacar a Panamá del Parlacen El abogado panameño Moisés Bartlet Quiel pidió entonces al Tribunal Electoral (TE) hacer un referéndum al respecto e incluir en las elecciones de mayo de 2024 una papeleta adicional que pregunte a los panameños si desean que el país siga formando parte del Parlacen.
Y también otro grupo de ciudadanos, encabezados por el abogado Ernesto Cedeño, solicitaron formalmente a la Cancillería de Panamá salir del organismo y explicar los beneficios que el país ha logrado con su incorporación al mismo.
“Es un ente inoperante, que ha sido el bastión para personas que están eludiendo los rigores de la justicia y hay que salir de él”, dijo Cedeño entonces.
Según Cedeño, la Corte Suprema de Justicia de Panamá estableció en una sentencia del 2 de febrero de 2012, la forma cómo salir del organismo y descartó que el referendo sea el mecanismo para salir.
“No necesitamos una quinta papeleta para salirnos de un ente que nunca se nos consultó entrar”, dijo Cedeño.
La abogada Rosemary Barrios, otra de las impulsoras de la salida, sostiene que “La justicia panameña se sienta burlada. Necesitamos que Panamá salga del Parlacen”
“Es mucho más de lo que ha costado que los beneficios. No nos beneficia en nada”, señaló.
La reacción oficial
Ante esta ola de peticiones para salir del Parlacen, la única reacción oficial ocurrió también en agosto, cuando la ministra de Relaciones Exteriores de Panamá, Janaina Tewaney, propuso reformar el Parlacen, sin describir en qué consistían esas reformas.
“El propósito del Parlacen ciertamente está en revisión y debe ser revisado. Los organismos internacionales tienen que ser relevantes a las necesidades de la población”, Dijo Tewaney.
Panamá no es el primer país donde funcionarios cuestionados son juramentados por el Parlacen como diputados, logrando así conseguir fuero para evitar enjuiciamientos. Casos similares se han dado en Guatemala, El Salvador, Honduras y Nicaragua.
El Parlacen está integrado por Guatemala, El Salvador, Honduras, Nicaragua, República Dominicana y Panamá. Cuenta con un total de 120 diputados, 20 por cada país miembro, pero es solo un foro político y sus resoluciones no son vinculantes para ningún gobierno o país.