Panamá cumple este lunes 2 semanas de protestas en medio de una crisis que se ha prolongado mucho más de lo que se esperaba y que está impactando negativamente a todo el país.
Las manifestaciones continuaron la noche del domingo y los bloqueos se mantenían este 6 de noviembre en algunos puntos de calles capitalinas y carreteras en diferentes provincias, principalmente en Chiriquí y Bocas del Toro, donde la escasez de productos varios, incluyendo combustibles gas propano, golpea a los panameños.
Algunos comerciantes han recurrido al transporte aéreo de sus mercaderías, pero esto encareció considerablemente los precios.
Los sectores agropecuario, comercial, turismo y restaurantero continuó durante el fin de semana reportando considerables pérdidas.
Mientras tanto, el transporte colectivo de Metrobús anunció para este lunes “servicio normal” en la capital, con la advertencia de que los cierres que puedan montarse afectarán su operación.
Y mientras continúan los reclamos por el millonario contrato del estado con una firma canadiense, el país está a la espera de la resolución de la Corte Suprema de Justicia sobre el mismo, lo que podría darle un giro a la historia de protestas masivas y abrir la puerta para un litigio millonario.