La dictadura de Nicaragua anunció este miércoles planes para redirigir la exportación de su café hacia mercados emergentes como China, Irán y Rusia, tras la suspensión de operaciones y quiebre de Cisa Exportadora, una empresa clave en la comercialización del café nicaragüense en el ámbito internacional.
Cisa Exportadora, parte del Grupo Mercon y con presencia en varios países, ha sido durante casi siete décadas un actor principal en la exportación del café nicaragüense, conocido por su alta calidad. Sin embargo, la reciente quiebra global de la empresa ha dejado a los productores locales sin un acopiador internacional que negocie sus granos en el exigente mercado internacional; ante ello, el régimen de los dictadores Daniel Ortega y Rosario Murillo, han anunciado buscar la venta con “nuevos mercados” para este importante producto de exportación nicaragüense.
La dictadura, reconocida internacionalmente por su violación a los derechos humanos y su nada transparente gestión, emitió un comunicado anunciando facilitar la comercialización y exportación del café, aprovechando “los nuevos espacios comerciales” internacionales abiertos recientemente.
“También realizaremos gestiones con aquellos países interesados en adquirir nuestro café de calidad ahora que hemos abierto nuevos espacios comerciales internacionales”, precisó el régimen.
La dictadura aseguró que ha venido promoviendo la producción del café nicaragüense “en todos los espacios, desde los productores, instituciones públicas, organismos, embajadas y ferias internacionales, lo que nos ha permitido aumentar la producción de café con calidad y excelencia”.
Estas gestiones incluyen la exploración de oportunidades en países como China, Irán, Corea del Norte y Rusia, regímenes con las cuales la dictadura de la familia Ortega-Murillo ha establecido oscuros nexos diplomáticos.
La quiebra de Cisa Exportadora no solo representa un cambio en la dinámica comercial del café nicaragüense, sino también un desafío para el sector que ha sido un pilar de la economía del país.
Nicaragua, con una población de 6,7 millones, ha visto en el café su segundo producto de exportación más importante, generando 600.000 empleos directos e indirectos durante su cosecha. Las exportaciones de café en 2022 ascendieron a 714,1 millones de dólares, un aumento significativo en comparación con el año anterior.