La Asamblea Legislativa de El Salvador eliminó la noche del martes el impuesto sobre la renta sobre la inversión en el extranjero y las remesas, como una forma de atraer capital y extranjeros ricos al país
Con el voto de 69 de los 84 legisladores, los diputados aprobaron reducir a cero la tasa previa del 30 % para el ingreso de capitales. El impuesto se elimina independientemente de la cantidad de dinero que se traiga.
La medida, una iniciativa del gobierno de Nayib Bukele, no ha revelado una estimación del costo fiscal que traerá a las finanzas públicas salvadoreñas.
La Ley del Impuesto Sobre la Renta establecía que los ingresos iguales o mayores a $150 mil debían pagar el 30% al momento de la entrada al país. Con la reforma, los inversionistas no tendrán que pagar y podrán inyectar ese capital a la economía salvadoreña
“Hoy, aprobamos una iniciativa que nos posicionará como un destino atractivo para los inversionistas externos, y corregimos una injusticia más de la vieja clase política, esa que permitió cobros abusivos a los hermanos de la diáspora que ayudan a sus familias”, dijo el presidente de la Asamblea Legislativa, el diputado oficialista, Ernesto Castro.
Según Castro, la reforma de Ley del impuesto sobre la Renta exonera el pago a inversiones, ingreso de capital y remesas de consumo.
“Esto permitirá dinamizar la economía nacional”, subrayó Castro.
El oficialismo destacó que la eliminación del Impuesto sobre la Renta busca mejorar la llegada de remesas familiares e inversión extranjera, pero la oposición cree que es una estrategia para incrementar la liquidez de la banca nacional porque es la principal fuente de financiamiento estatal.