Organizaciones internacionales de periodistas y de Derechos Humanos condenaron la decisión de un juez guatemalteco de enviar nuevamente a prisión al reconocido periodista José Rubén Zamora, en un emblemático caso de persecución judicial emprendida por la cuestionada fiscalía de ese país.
“La decisión del tribunal es una afrenta directa contra la libertad de expresión y el derecho de los ciudadanos a estar informados. Esta medida, carente de fundamentos legítimos, confirma un patrón de persecución orquestado contra José Rubén Zamora en Guatemala”, denunció José Roberto Dutriz, presidente de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP).
La Organización continental expresó su firme y categórico rechazo a la decisión de la Sala Tercera de Apelaciones Penal de Guatemala que revocó la medida sustitutiva por la cual se otorgaba arresto domiciliario a Zamora, fundador de elPeriódico.
La organización Reporteros Sin Fronteras también expresó su indignación por la decisión judicial que ordena el regreso a prisión del periodista.
“En un nuevo ejemplo flagrante de instrumentalización de la justicia, la reencarcelación de Jose Rubén Zamora fue ejecutada hoy por orden de una corte de apelaciones, a pesar de la reticencia del juez encargado del caso y en un preocupante clima de intimidación”, denunció Artur Romeu, director para América Latina de RSF.
La organización instó al sistema judicial guatemalteco “a respetar el derecho a un juicio justo y a cesar el uso indebido de los mecanismos legales para silenciar a los periodistas”.
“Urgimos a la Corte Suprema de Justicia a emitir de inmediato un fallo sobre la solicitud de amparo presentado por su defensa. La comunidad internacional debe mantener la presión sobre Guatemala para garantizar la libertad de prensa y el Estado de derecho”, dijo Romeu.
Por su parte la Fundación Gabo -fundada por el fallecido premio Nobel Gabriel García Márquez- expresó su “profunda preocupación” y “rechazo” a la orden de encarcelar nuevamente a Zamora.
“Este hecho evidencia la falta de independencia que aqueja al sistema judicial de Guatemala y la intención de criminalizar el ejercicio periodístico, y acrecienta el clima de hostilidad que enfrentan los periodistas de Centroamérica”, afirmó la Fundación Gabo en un comunicado.
En tanto, la Organización de Derechos Humanos, Amnistía Internacional exigió “la liberación inmediata y el levantamiento de todos los cargos” en contra de Zamora y urgió “poner fin al acoso judicial para acallar voces disidentes”.
Juanita Goebertus, directora de las Américas de Human Rights Watch calificó la decisión de encarcelar nuevamente a José Rubén Zamora como “un acto cruel de ensañamiento contra quienes denuncian la corrupción y un ejemplo de la falta de independencia judicial”, al tiempo que exigió su liberación inmediata.