La Oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos denunció este jueves la grave situación de los presos políticos y la persecución contra opositores bajo la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo en Nicaragua.
Según una actualización oral hecha este jueves, Volker Türk, alto comisionado de las Naciones Unidas, denunció que el número de personas detenidas arbitrariamente por expresar sus opiniones políticas o por ser percibidas como críticas al gobierno pasó de 195 en septiembre a 225 hoy (26 mujeres y 199 hombres).
“Esto incluye a familiares de opositores políticos detenidos, presuntamente para obligar a estos últimos a rendirse”, denunció Türk.
“Como informó mi predecesor, sus condiciones de detención son precarias. Los detenidos en El Chipote continúan sufriendo condiciones inhumanas de detención, con acceso limitado a atención médica, a dietas balanceadas y al contacto familiar regular. Su salud mental se deteriora cada día que pasa”, agregó el alto comisionado.
Türk también se refirió al “trato humillante y degradante” al que son sometidos familiares de los presos políticos, incluyendo mujeres mayores sujetas a cacheos desnudos.
El Alto Comisionado también mostró preocupación por el cierre de más de 3,000 organizaciones no gubernamentales nacionales e internacionales en Nicaragua, casi la mitad de las cuales solo desde septiembre, lo que ha dejado a innumerables personas sin acceso a sus servicios o asistencia.
Türk denunció el “amordazamiento de los medios de comunicación, con 26 medios nacionales y tres medios internacionales cerrados por el gobierno” así como “una nueva ley aprobada en octubre que exige el registro y la autorización del gobierno para la producción, filmación y exhibición de cualquier material audiovisual en el país”.
Destierro
Türk también denunció que al menos 12 ciudadanos nicaragüenses no han podido regresar a su propio país, según se informa por decisión del Gobierno de Nicaragua, y sin ninguna información sobre el motivo de tal negativa.
“Hago un llamado a las autoridades para que garanticen que todos los nicaragüenses puedan salir y entrar de su país de conformidad con el derecho internacional”, dijo Türk.
“Defensores de los derechos humanos, periodistas, miembros del clero o personas percibidas como opositores políticos son arrestados, hostigados e intimidados. Algunos son procesados por los delitos de conspiración para atentar contra la integridad nacional o por “noticias falsas”. Todo parte de un esfuerzo sistematizado para sofocar la oposición y la disidencia”, señaló el funcionario.
Türk también denunció una serie de irregularidades en las elecciones municipales de noviembre pasado.
Éxodo de nicaragüenses
Türk señaló que “los efectos de esta crisis continúan repercutiendo más allá de sus fronteras” y reveló que entre enero y octubre de 2022, Costa Rica recibió 70.000 nuevas solicitudes de asilo de nicaragüenses y más de 147.000 nicaragüenses terminaron en las fronteras de los Estados Unidos de América.
El alto comisionado denunció que este año, Nicaragua no se comprometió con varios órganos creados en virtud de tratados de derechos humanos de las Naciones Unidas en el contexto de la consideración de sus informes periódicos y se negó a cooperar con la visita prevista al país en 2023 por parte del Subcomité para la Prevención de la Tortura y Otros Tratos Crueles, trato inhumano o degradante.
Condena de la Unión Europea
Por su parte, la Unión Europea condenó “las severas restricciones al espacio cívico, el continuo hostigamiento de voces disidentes y la represión en curso contra opositores políticos, clérigos, medios de comunicación independientes, académicos, sociedad civil, defensores de los derechos humanos y pueblos indígenas”.
“Reiteramos nuestro llamamiento a las autoridades para que pongan en libertad inmediata e incondicionalmente a todos los presos políticos y anulen todos los procedimientos judiciales contra ellos”, dijo la Unión Europea en la misma sesión.