Las autoridades salvadoreñas anunciaron un amplio operativo logístico y de seguridad para el próximo domingo, cuando la selección salvadoreña reciba a Trinidad y Tobago, en la segunda fecha de la Liga de Naciones de la Concacaf.
El director de la Policía Nacional Civil (PNC), Mauricio Arriaza, dijo que 600 agentes serán desplegados en el estadio Jorge Mágico González, en la capital, que será reinaugurado como escenario futbolístico después de su reconstrucción.
El plan, dijo, es de cero tolerancia y la venta de bebidas alcohólicas está prohibida dentro del recinto deportivo.
Explicó que serán “3 anillos de seguridad en los alrededores, para evitar inconvenientes con los aficionados, y 13 accesos al estadio estarán habilitados”.
“Instalaremos detectores de metal para evitar ingreso s de armas u otros objetos contundentes”, anunció Arriaza.
El paso vehicular por la zona, que es de intenso tráfico, será parcialmente restringido desde la mañana.
“Para todos los aficionados les pedimos que evitemos el exceso de bebidas embriagantes, nosotros vamos a estar atentos y toda aquella persona que llegue y que observemos en estado de ebriedad va a ser retirada”, agregó.
El Salvador vivió en mayo pasado el pasaje más mortífero de su historia deportiva cuando en el estadio Cuscatlán, el más grande del país, una estampida humana durante un juego entre Alianza y FAS, los dos más populares de la liga local, mató a 9 personas.
El caso obligó a la suspensión del torneo y hay al menos 5 personas arrestadas por estar involucradas en la sobreventa de boletos y por no aplicar medidas de seguridad preventivas.
La Selecta, como se le conoce a la selección, lleva 13 juegos consecutivos sin ganar y la afición está desesperada por los malos resultados. El jueves perdió 2-0 ante Guatemala.
El juego contra Trinidad y Tobago está programado para las 8:10 de la noche del 10 de septiembre.