Nicaragua despertó con un sueño y lo hizo realidad con autoridad. En una jornada sólida para el béisbol pinolero, la selección nacional selló su clasificación al Clásico Mundial de Béisbol 2026 con una victoria contundente de 6-0 sobre Taiwán, dejando en claro que su llegada al torneo de los grandes no fue casualidad, sino el resultado de un equipo aguerrido, con clase y personalidad.
No fue solo una victoria, fue una declaración. Los nicas dominaron el Preclásico con un récord inmaculado de 3-0, dejando atrás a una potencia asiática como Taiwán, que jugaba en casa y llegaba con el cartel de favorito.
Pero este equipo nicaragüense no creyó en pronósticos. Desde el primer lanzamiento, salieron con la determinación de escribir historia, y vaya que lo hicieron.
Un arranque perfecto y un pitcheo de acero
Todo comenzó con un detalle que cambiaría el destino del partido: un error del campocorto Yu Chang, el hombre de Grandes Ligas, en un roletazo de Juan Montes. Esa grieta en la defensa taiwanesa fue el punto de quiebre.
Brandon Leytón, en estado de gracia en este torneo, conectó un doble remolcador que puso a Nicaragua en ventaja y, acto seguido, Chase Dawson amplió con un sencillo impulsor.
Un golpe que Taiwán jamás pudo responder.
El pitcheo nica fue la otra gran historia. Dilmer Mejía inició con temple, Osman Gutiérrez entró como un salvador para salir de un atasco de bases llenas en el cuarto episodio, y luego el bullpen selló la obra maestra. Crawford, Garrido y Teller combinaron esfuerzos para frustrar cualquier intento de reacción.
Mientras tanto, la ofensiva nicaragüense aguardó su momento para dar el golpe final. Y ese llegó en la novena entrada con un ataque letal. Chase Dawson conectó un doblete de dos carreras, seguido de un cañonazo de Elián Miranda, que puso el 6-0 definitivo.
Celebración histórica y un mensaje al mundo
Cuando el último out cayó en el guante de Juan Montes, Nicaragua explotó en júbilo. Los jugadores se abrazaron, alzaron los brazos y celebraron como lo que son: un equipo que desafió las expectativas y se ganó su boleto al Clásico con entrega y pasión.
“Sabíamos que podíamos hacerlo. Nos preparamos para este momento, luchamos en cada turno, en cada lanzamiento, y hoy celebramos como un solo país”, dijo Brandon Leytón, una de las figuras del torneo.
Con esta clasificación invicta, Nicaragua no solo se mete entre los mejores, sino que envía un mensaje al mundo del béisbol: están listos para competir al más alto nivel.
El Clásico Mundial 2026 ya tiene un nuevo invitado de lujo. Nicaragua va con todo.