Los costarricenses se encuentran entre los consumidores que menos utilizan el efectivo para realizar pagos en América Latina, revela un estudio de la consultora McKinsey & Company.
El estudio revisa cómo el uso de las tarjetas y billeteras digitales desplazó el dinero en efectivo como método de pago para los latinoamericanos en los últimos dos años, un cambio que fue impulsado principalmente por la pandemia de COVID-19 que empujó a utilizar canales electrónicos para evitar el contacto físico.
McKinsey realizó dos “extensas” encuestas sobre los medios de pagos en más de 15,000 consumidores en 10 países de habla hispana en 2021 y 2023.
En el top de países que menos utilizan el efectivo se encuentra Chile, con un 13 %, seguido de Argentina, con un 25 %. En el tercer lugar sobresale Costa Rica con un 28 %.
Panamá también se encuentra entre los países estudiados, donde un 32 % utiliza efectivo, y Guatemala con un 40 %.
Resultados “sorprendentes”
Los resultados de las encuestas son sorprendentes, asegura la firma, pues la región se caracteriza por un alto movimiento de efectivo y una alta tasa de empleo informal.
Según la encuesta, un 70 % de los consultados afirmó que había utilizado efectivo en los últimos 30 días, pero solo un 30 % indicó que era su medio de pago preferido.
“Muchas personas aún reciben sus ingresos en efectivo y lo utilizan para una gran variedad de transacciones, dado que varios comercios pequeños aceptan pagos en dinero físico. Pero si estos consumidores pudieran elegir, preferirían usar tarjetas y servicios de pagos móviles”, señala en las conclusiones.
McKinsey indicó que en 2019 varios países latinoamericanos tenían una cobertura de entre 30 % y 50 % de cuentas bancarias, mientras que para 2021 creció a un 72 %.
De acuerdo con la encuesta, un 36 % de los latinoamericanos prefiere tarjeta de débito como método de pago, un 18 % utiliza las tarjetas de crédito, un 10 % recurre a métodos móviles y un 6 % utiliza otros métodos.