El Fondo Monetario Internacional (FMI) renovó el jueves los llamados que presionaron a El Salvador para que reduzca sus políticas relacionadas con el Bitcoin y revise su marco regulatorio en torno al activo digital.
“Lo que hemos recomendado es una reducción del alcance de la Ley Bitcoin, el fortalecimiento del marco regulatorio y la supervisión del ecosistema Bitcoin, y la limitación de la exposición del sector público a Bitcoin”, dijo Julie Kozack, directora del departamento de comunicaciones del FMI, en una conferencia de prensa el jueves.
Kozack no detalló cuales cambios regulatorios han propuesto.
Las autoridades salvadoreñas negocian con el Fondo Monetario Internacional un préstamo de unos 1.300 millones de dólares desde 2021, tanto el gobierno salvadoreño como el Fondo han dicho repetidamente que están cerca de alcanzar un acuerdo sin que hasta ahora se concrete.
“Las discusiones actuales se centran en las políticas para fortalecer las reformas” que sirvan para impulsar la productividad y la gobernanza económica, añadió la portavoz y “abordar los riesgos derivados del bitcóin es un elemento clave de estas discusiones”, precisó.
Desde que El Salvador legalizó Bitcoin como una forma de moneda de curso legal en 2021, el FMI ha presionado al país centroamericano para que se aleje de Bitcoin y adopte la infraestructura financiera tradicional.
En agosto de 2024, el FMI expresó las mismas demandas, pero admitió que muchos de los supuestos riesgos de la adopción de Bitcoin “aún no se han materializado”.
Lozack agregó que la propuesta de presupuesto de El Salvador para 2025 es un buen paso para fortalecer las finanzas públicas que necesita una fuerte implementación.