El crecimiento récord de Costa Rica, considerado la “Suiza centroamericana”, es sin duda un “éxito económico”, afirmó este lunes el economista ecuatoriano Augusto de la Torre, quien no descarta que ese dinamismo se eche a perder por los riesgos latentes con la violencia y el mercado cambiario.
Después de Panamá, Costa Rica fue la segunda economía de mayor crecimiento en América Latina en 2023 con una tasa cercana a un 5 % gracias al impulso de las exportaciones de productos médicos y el flujo de la inversión extranjera directa (IED).
En una conferencia organizada en la Asamblea Legislativa, el también profesor de la Universidad de Columbia explicó que ese éxito responde a que Costa Rica desde “temprano” escogió su “identidad económica” hacia afuera como un proveedor de servicios y bienes “interesantes” para los mercados internacionales.
La mirada hacia el mercado exterior no es la solución mágica, añadió el economista citando el caso de México que aplicó la misma técnica, pero no tiene el mismo volumen de crecimiento. El éxito costarricense se debe a una “combinación potente” de tres pilares: atraer constantemente la inversión extranjera y retenerla, tener un capital humano bueno y una calidad de instituciones superior al promedio, indicó.
De esa manera, Costa Rica está “al borde de convertirse en un país de ingreso alto si es que consigue mantener el secreto del éxito y consigue reinventarse”, indicó.
De la Torre consideró que un país con mayor inversión extranjera tiene menos dependencia de las remesas porque estos capitales son la “señal” de que los empresarios internacionales están dispuestos a trabajar con la fuerza laboral y, por lo tanto, la migración es menor. “Es muy virtuoso”, indicó el economista.
Dolores de cabeza
En el corto plazo, uno de los principales retos de Costa Rica corresponde a los efectos colaterales de la transición a un sistema monetario de metas de inflación con flexibilidad cambiaria, donde el “sube y baja” del colón frente al dólar marca el ritmo de la canción que juegan los agentes económicos.
El foro "Costa Rica: Éxito económico y nuevos desafíos" es una oportunidad clave para reflexionar sobre nuestras dualidades. Agradezco @mmpadilla_ppsd UCCAEP y al Dr. Augusto de la Torre por organizar esta conferencia. pic.twitter.com/QdfLiGxSyq
— Rodrigo Arias S. (@Rodrigo_Arias) March 4, 2024
La apreciación de la moneda ha sido “muy traumática” y no se deriva de un problema fiscal, sino monetario. El Banco Central de Costa Rica está en “transición desafiante” de migrar a un sistema de metas de inflación con flexibilidad cambiaria, donde el país centroamericano puede aprender la escuela en Chile, Colombia, México y Brasil. El economista comparó este proceso como “Moisés con el desierto tratando de llegar a la tierra prometida”.
Las características de este sistema es que la inflación no depende de la apreciación de la moneda, al tiempo que la economía gana independencia en la política monetaria y el banco central puede utilizar la tasa de interés de manera cíclica.
Muy parecido ocurre en Estados Unidos, donde los estadounidenses no se preocupan por el valor del dólar sino del costo de la vida, mientras que la Reserva Federal (Fed) es el “oráculo” en el manejo de las tasas de interés para controlar los precios en la economía.
Rodrigo Arias Sánchez, presidente de la Asamblea Legislativa, reclamó que, a pesar del buen desempeño económico, Costa Rica es un “terreno fértil para que venga la narcoactividad” dado que no se tiene ejército ni una ley de extradición con Estados Unidos.