Cadence, dedicada a la fabricación por contrato de dispositivos médicos, inauguró nuevas instalaciones en Costa Rica, su primera operación fuera de Estados Unidos.
La planta se encuentra en Coyol Free Zone, un parque industrial que alberga el 52 % de la fabricación de dispositivos médicos en Costa Rica y que incluso se encuentra en la lista de las 10 mejores zonas libres a nivel mundial.
Rob Werge, presidente de Cadence, destacó que Costa Rica ofrece una ubicación estratégica, al tiempo que calificó de “talentosa” la fuerza laboral. Por esto, se convierte en el “destino ideal para expandir nuestras operaciones fuera de los Estados Unidos”, añadió.
Con sede en Staunton, Virginia, Estados Unidos, Cadence es un proveedor de productos de avanzada tecnología para el sistema de salud. Dentro de EE. UU., también tiene plantas en Connecticut, Pensilvania, Rhode Island, Wisconsin y Florida, donde genera cerca de 800 empleos.
“Damos la bienvenida a Cadence y agradecemos la confianza en nuestros atributos y oferta país para crecer y suplir a sus socios desde Costa Rica”, añadió Manuel Tovar, ministro de Comercio Exterior.
Cadence adelantó que expandirá su capacidad de producción actual en Costa Rica, donde prevé un ingreso de $40 millones y duplicar su fuerza de trabajo.
La planta en Costa Rica tiene una sala limpia clase 7, según los parámetros de la Organización Internacional de Normalización (ISO). Además, tiene capacidad de ensamblaje de dispositivos terminados, servicios de valor agregado y tecnologías de maquinado de precisión verticalmente integradas.
La agencia Promotora de Comercio Exterior de Costa Rica (Procomer) reporta que los dispositivos médicos fueron de los principales productos exportados el año pasado, con más de $7,624 millones al término de 2023.
Los dispositivos médicos son el producto estrella de Costa Rica con más de 90 empresas. En 2023, exportó un 48 % de los equipos de precisión y médico a Norteamérica, un 20 % a Europa, un 19 % a Centroamérica, seguido de un 6 % a Asia.