Gobierno de Honduras presenta plan de reforma fiscal, empresarios lo rechazan

El Gobierno de Honduras publicó el proyecto de la Ley de Justicia Tributaria, que pretende sea aprobado en el Congreso Nacional, con el que derogaría una serie de beneficios fiscales a los que comúnmente llaman exenciones.

«Se derogan los beneficios fiscales denominados exenciones, exoneraciones, incentivos brindados en contratos o cláusulas de estabilidad, bonificaciones, deducciones, liberaciones tributarias o aduaneras y, en general, todos los beneficios preferentes previstos por la normativa tributaria y aduanera», reza el artículo 16 del proyecto jurídico.

Sin embargo, el sector empresarial rechazó las pretensiones del gobierno y las consideró un “ataque directo al empleo y la inversión”.

“La propuesta de reforma fiscal presentada por el gobierno hondureño es un ataque directo al empleo directo en nuestro país y a la inversión”, dijo el presidente del Consejo Hondureño de la Empresa Privada (COHEP), Mateo Yibrín.

“Lo que se pretende (con las modificaciones) es no atraer inversiones al país, sino alejarlas; lo que se pretende no es generar empleo, sino eliminar los puestos de trabajo formales que tiene actualmente el país”, externó el director ejecutivo del COHEP, Armando Urtecho.

Según la presidencia de Xiomara Castro, lo que pretenden es que pague más quien tenga más y que las exoneraciones propuestas por un máximo de 10 años se conviertan en incentivos para el desarrollo “que generen beneficios para todo el país” y no para grupos económicos.

Otro de los objetivos, se ha explicado, es que Honduras no sea considerado un paraíso fiscal.

Busca, de acuerdo a sus promotores, que el país tenga capacidad de generar recursos necesarios para combatir la desigualdad, la pobreza y que genere un modelo de desarrollo sostenible.

La presidenta, de línea izquierdista, insiste en que el país requiere una nueva estrategia fiscal, con transparencia, igualdad y de combate decidido en contra de la corrupción.

Xiomara Castro sostiene la idea de desmontar el modelo económico neoliberal en Honduras, al cual culpa de la profundización de la pobreza. 

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