El Salvador y Guatemala se han mantenido activos este año en la asignación de espectro radioeléctrico para redes más avanzadas, con miras al despliegue de la polémica 5G.
Un análisis de la plataforma de inteligencia de negocios BNamericas recoge las últimas subastas del espectro en Guatemala, Honduras, El Salvador y Nicaragua, una tarea donde el mercado guatemalteco busca ponerse al día después de ser uno de los países con más rezago en la región.
El espectro radioeléctrico es un recurso natural administrado por los gobiernos donde se transmiten las ondas de radio electrométricas. Se considera la “materia prima” de la industria de telecomunicaciones, pues su liberación permite el desarrollo de redes móviles. Para el despliegue de la 5G se requieren tanto de bandas de baja frecuencia (1 gigahercio –GHz–) como de alta frecuencia (20-40 GHz).
BNamericas recopila en su análisis que Guatemala subastó este año espectro de la banda de 2.5 GHz, con una recaudación de $47 millones. De 10 bloques asignados, Tigo, de la multinacional Millicom, se quedó con ocho y la mexicana Claro con dos.
Guatemala también asignó espectro de la banda de 700MHz, considerada la de mayor alcance y penetración para la red 5G. En este concurso recaudó $125 millones. Claro adquirió dos bloques de 20 MHz, valorados cada uno en $42.8 millones, y Tigo se quedó con uno de 20 MHz.
En El Salvador, la Superintendencia General de Electricidad y Telecomunicaciones (Siget) confirmó en junio la asignación de 30 MHz de espectro en la banda extendida AWS (para el despliegue de la tecnología LTE) a Telefónica Móviles (Movistar), ahora propiedad de General Internacional Telecom.
BNamericas no encontró planes para la activación de la red 5G en Honduras, mientras que en Nicaragua su Ente Regulador (Telcor) concluyó la migración de los operadores de radiodifusión FM a la banda de baja frecuencia 984-960MHz, donde podrán ofrecer servicios más avanzados.
Además de espectro, el despliegue de la 5G, considerada la “red más inteligente”, requerirá que los dispositivos tengan la capacidad para conectarse, desde teléfonos, electrónicos, vehículos sin conductor hasta cámaras de tráfico.
En Guatemala se registran más de 20.6 millones de usuarios móviles, mientras que en El Salvador se tienen un poco más de 11.5 millones de líneas móviles. En Honduras se contabilizan 7.8 millones y en Nicaragua 7 millones.