La Constancia se posiciona como la primera compañía “MacroEmprendedora” en El Salvador

Con esta nueva filosofía de negocios, La Constancia busca aprovechar lo mejor de dos mundos corporativos: por un lado, apalancarse de su herencia, tradición y escala, y a la vez, moverse con agilidad y ser disruptiva como lo son hoy las “startups”. Esto con el objetivo de impactar positivamente a sus clientes y familias.

En La Constancia existe un propósito compartido a nivel mundial por AB InBev, su casa matriz, y es “Soñar en grande para crear un futuro con más motivos para brindar”. Lo que se ha traducido en una forma única de hacer las cosas como empresa, siendo pioneros en un innovador modelo de negocio que se ha denominado “MacroEmprendedores”.

Sí, en la empresa fabricante de bebidas, la más importante y de mayor trascendencia e historia en El Salvador, transmiten un mensaje de mucho contenido social: “Soñamos en grande por un país en progreso”.

Esto, de acuerdo a la compañía, se traduce “en una forma de hacer las cosas como empresa, siendo pioneros en un innovador modelo de negocio”.

El objetivo es mejorar las oportunidades de venta para los clientes y que, a la vez, impacte positivamente en el bienestar de sus familias.

En tiempos en que la responsabilidad social empresarial y la sostenibilidad dejaron de ser conceptos etéreos, La Constancia es abanderada en la puesta en práctica de estos.

El crecimiento de los negocios de los proveedores locales de la micro y pequeña empresa, brindar un empleo de oportunidades a los colaboradores y apoyar a las comunidades vecinas en su desarrollo, son parte de esa compleja tarea de cara a la sociedad.

Ser “MacroEmprendedores” es una apuesta de negocio que promueve el progreso, “surgida de forma global en AB InBev, en El Salvador busca generar impactos positivos hacia cada uno de los sectores en que La Constancia desarrolla su operación: más de 65 mil clientes que son emprendedores salvadoreños; cientos de proveedores que pertenecen a la micro, pequeña y mediana empresa; así como los impactos positivos entre oportunidades y beneficios adicionales a la ley hacia más de 1,200 colaboradores directos y la generación de empleos de cerca de 3,500 indirectos generados en las actividades comerciales”, dice. 

Ser un actor de impacto positivo para El Salvador es el objetivo. 

Para ello están “impulsando a sus comunidades vecinas a las operaciones de sus 3 plantas de producción y sus más de 10 centros de distribución en todo el territorio desde oriente, centro y occidente” del país.

El concepto “MacroEmprendedor”

“Tenemos una empresa con una gran trayectoria y fuerte presencia en el país, somos Macro; pero a la vez tenemos el espíritu de un emprendedor que siempre se atreve a innovar, a transformarse y a ser agente de cambio en su entorno. Eso es lo que nos hace MacroEmprendedores, que trabajamos desde la sostenibilidad no como parte del negocio, sino como nuestra guía central de nuestras acciones como operación y como actor social”, explicó Carol Colorado, directora Legal y Asuntos Corporativos de La Constancia. 

Con ello, resume lo que encierra el concepto, ese “ímpetu” de continuar hacia adelante con innovación, ingenio, compromiso y constante lucha, como lo hacen los microemprendedores, que buscan oportunidades cada día. 

El impulso de su gente ayuda a construir diversos equipos mediante la inclusión y colaboración, “brindando oportunidades equitativas en desarrollo de talento, crecimiento profesional mundial por el trabajo en equipo entre sus operaciones internacionales y beneficios para ellos y sus familias desde salud física, psicológicas, mentorías y otros espacios de convivio familiar”.

Pero además, el cambio lo lideran innovando sus operaciones con energía 100 % renovable producida por paneles solares de un socio para operar las 3 plantas de producción: cerveza, agua y refrescos.

Esto ha permitido una reducción considerable de emisiones de CO2. 

También desarrollan ISKALI, un proyecto verde para la recuperación del corazón verde de San Salvador que busca restaurar el volcán. Esto ha impactado positivamente en varias hectáreas. 

Cuentan además con la Fundación Coca Cola, que ha beneficiado a miles de familias de Nejapa desde 2022.

También impulsan el mejor uso del plástico, con “Hagámosla Circular”, “que ha transformado la operación para buscar mejoras en uso de plástico incluyendo un importante porcentaje de materia reciclada y, a la vez, promueve una cultura de reciclaje que desde 2022 a la fecha lleva varias campañas en las que se han recolectado 29.8 millones de libras de plástico para ser nuevamente procesadas”.

“Lideramos el cambio e innovamos enfocados en nuestros consumidores por lo que contamos con una plataforma integral de consumo responsable “Consumo inteligente” activa de años anteriores y que solo en 2022 ha alcanzado a miles de salvadoreños con sus campañas educativas”, añade La Constancia, una empresa que representa el 2.4 del PIB en El Salvador y contribuye a dinamizar el 1.4 % de la producción intermedia del país y representa el 3.5 % del consumo intermedio de la Industria de Bebidas y que, según sus mismos datos, representa el 2.8 % de los ingresos tributarios totales de El Salvador. 

Y externamente, la empresa cuenta con una amplia base de proveedores conformada principalmente por empresas locales, que representan el 76% del valor de sus compras, lo que confirma su compromiso y aporte a la generación de empleos e ingresos en la economía nacional. 

De esta forma, La Constancia se une a un movimiento internacional de progreso que impulsa AB-Inbev en más de 12 operaciones a nivel regional en Latinoamérica.

La Constancia es una empresa que, siendo centenaria y con una herencia fuerte por su trayectoria, trabaja siempre a la vanguardia, innovando, con un espíritu emprendedor para mover al progreso a sus clientes, proveedores, comunidades y colaboradores y “sueña en grande” para trabajar hacia el progreso de El Salvador.

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