La Autoridad Marítima de Panamá (AMP) informó el viernes la cancelación de 107 registros de embarcaciones de bandera panameña incluidas en listas de sanciones internacionales, como parte de una medida para proteger la reputación del país en el ámbito marítimo global. Además, 18 naves adicionales se encuentran en proceso de ser dadas de baja del registro panameño.
La decisión se ejecuta bajo el Decreto Ejecutivo No. 512 del 18 de octubre de 2024, que autoriza a la AMP a cancelar de oficio las matrículas de buques, propietarios y personas vinculadas que aparezcan en listas internacionales de sanciones, como las de la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) de Estados Unidos, la Unión Europea y el Reino Unido.
La acción panameña se da en el contexto de una nueva fase de la política de ‘máxima presión’ de la administración Trump, enfocada en obstaculizar el transporte de crudo iraní y ruso a través de lo que Washington denomina la “flota fantasma”. Esta red de buques opera con prácticas opacas, incluyendo el cambio de banderas, apagado de sistemas de localización y transbordos en altamar.
La medida fue tomada para agilizar un proceso que antes tardaba hasta tres meses bajo la Ley General de Marina Mercante (Ley 57), cuyo artículo 49 establecía los parámetros para la cancelación de naves, pero que resultaba insuficiente ante la dinámica de operaciones ilícitas globales.
Para evitar el ingreso de naves de alto riesgo al Registro Internacional de Buques de Panamá, la AMP ha reforzado los mecanismos de análisis previo al abanderamiento, incluyendo ahora no solo criterios técnicos, sino también el historial de propiedad y operación de las embarcaciones.
También se han implementado matrices de riesgo y nuevas plataformas tecnológicas para detectar buques con posibles vínculos a actividades ilícitas, como narcotráfico, lavado de dinero o comercio sancionado.
La AMP dijo que con estas acciones busca asegurar que ningún buque sancionado opere bajo el pabellón panameño, respetando al mismo tiempo los derechos legales, como las inscripciones de hipotecas navales.
Además, la Dirección General de Marina Mercante ha iniciado un proceso de revisión y fortalecimiento de su legislación nacional para alinear el desempeño del registro con los convenios internacionales en materia de seguridad marítima y prevención de la contaminación.
“Estas medidas permiten que Panamá reafirme su compromiso con la transparencia, la legalidad y la seguridad marítima, consolidando su posición como uno de los registros más grandes y con mejores estándares de cumplimiento a nivel global”, dijo la AMP.
Panamá es el país con más buques abanderados en el mundo, la AMP tiene un total de 8,816 buques registrados con la bandera panameña, lo que deja unos $112 millones de ingresos al fisco panameño. En comparación, Estados Unidos tiene unas 3.400 embarcaciones registradas y China poco más de 3.700.
La eliminación de los buques sancionados del registro panameño supone un importante golpe a las operaciones de transporte ilegal de crudo y fortalece la posición de Estados Unidos en su intento por asfixiar financieramente a Irán y Rusia mediante restricciones navales.