Antigua Guatemala se detuvo por un instante este fin de semana. Y no por sus arquitectura majestuosa ni por sus cielos volcánicos. Fue Ricardo Arjona, el trovador más universal de Guatemala, quien apareció como un susurro entre adoquines, guitarras callejeras y nostalgia.
El cantautor fue captado en pleno corazón de la ciudad colonial, vestido con su habitual color neutro y esa aura de misterio que lo acompaña como un verso no cantado.
Esta vez, el escenario fue la Calle del Arco, el Convento de las Capuchinas, y el icónico Palacio de los Capitanes Generales, donde según reportes, Arjona habría estado filmando… algo.
Barcelona. https://t.co/4zWhAf6Epk pic.twitter.com/zAcacwWtKJ
— Ricardo Arjona ® (@Ricardo_Arjona) April 25, 2025
Aún sin confirmación oficial, el rumor ya tiene forma: cámaras, producción, y Arjona caminando como si tejiera poesía con cada paso.
¿Nuevo material? ¿Un homenaje a su tierra? Nadie lo dice, pero todos lo esperan.
El momento más comentado llegó cuando se cruzó con Il Trovatore Della Città, un cantante local que interpreta ópera y baladas en las calles empedradas de la ciudad. El relato, contado por el propio trovador en Instagram, tiene todo el aire de una película italiana:
“¿Qué andás cantando vos?”, me dijo el genio de Antigua. Y yo, yo le dije: “A usted maestro, a usted…”
La imagen que acompaña la publicación muestra a Arjona rodeado de jóvenes, sonriendo, firmando, siendo parte de un momento que para muchos será una leyenda urbana dentro de poco.
La cuenta “Arjona Guatemala” confirmó que el artista estuvo en el Palacio de los Capitanes Generales el 25 de abril a las 14:15, y fueron Saira y Saraí García quienes captaron la imagen que ya circula entre fanáticos como una postal de otro tiempo.
No es la primera vez que Arjona elige Antigua como telón de fondo para sus proyectos más íntimos. Su concierto virtual Hecho a la Antigua, grabado durante la pandemia en la misma ciudad, fue un testamento de amor a sus raíces, a la melancolía y a la música sin artificios.
Ricardo lo ha dicho una y otra vez: Antigua le recuerda quién era antes de ser “Ricardo Arjona”, y quizá por eso regresa, una y otra vez, a perderse entre sus sombras y sus luces. Esta visita, tan silenciosa como poderosa, podría ser el primer acorde de algo grande.
¿Será que se viene un nuevo disco? ¿Un documental? ¿Un regreso más íntimo que nunca? Como buena balada arjoniana, la respuesta aún se esconde entre líneas.