Estados Unidos recibió desde enero más de 1.5 millones de solicitudes de personas que esperaban patrocinar la entrada de migrantes de cuatro países, un número extraordinario que podría poner en peligro el objetivo de la administración Biden de reducir los cruces fronterizos, según documentos internos obtenidos por la cadena televisiva CBS.
La ráfaga de cientos de miles de solicitudes de patrocinio en nombre de posibles migrantes de Cuba, Haití, Nicaragua y Venezuela ha abrumado a los trabajadores sociales en los Estados Unidos del Servicios de Ciudadanía e Inmigración (USCIS), que no pueden aprobar más de 30 mil llegadas bajo el programa cada mes.
Los ciudadanos estadounidenses, residentes y otros con un estatus de inmigración legal son elegibles para patrocinar a migrantes de estos cuatro países, siempre y cuando acepten apoyarlos financieramente. El programa se conoce popularmente como “parole”. A los migrantes que llegan bajo el programa se les conceden permisos de trabajo de dos años bajo la autoridad de libertad condicional humanitaria.
Los documentos internos del Departamento de Seguridad Nacional obtenidos por CBS News indicaron que a finales del mes pasado, la agencia estaba recibiendo un promedio de casi 12 000 solicitudes por día de aquellos que buscaban patrocinar a cubanos, haitianos, nicaragüenses y venezolanos, llamando al número de “abrumador”. Los documentos señalaron que se procesaron solicitudes por mes en menos de tres días debido al límite mensual de 30.000.
Más de 100 mil migrantes han llegado a Estados Unidos en el marco de la iniciativa de patrocinio. Pero el gobierno estaba supervisando más de 580.000 casos pendientes para los haitianos, más de 380.000 para los cubanos, casi 120.000 para los venezolanos y más de 20.000 para los nicaragüenses a finales de abril. Otros casos estaban siendo revisados o habían sido aprobados.