La Cámara de diputados de España eligió este jueves a Pedro Sánchez Pérez Castejón como presidente de Gobierno para un período de cuatro años, en el que obtuvo 179 votos a favor y 171 votos en contra, obteniendo de esta manera, el apoyo de todo el congreso con la excepción del PP, VOX y UPN.
De esta forma Sanchez superó la mayoría absoluta en el congreso español, que le convierte presidente por segunda ocasión consecutiva. Las expectativas estaban en si el mandatario lograría obtener los votos suficientes, luego de mantener una amplia y larga negociación con los partidos independentistas de Cataluña -cuya ciudad principal es Barcelona- con el que como punto fundamental para dar su apoyo, tenían como elemento clave, la negociación de la creación de una Ley de Amnistía para acabar con el conflicto que tiene el Estado con la comunidad catalana, luego del referéndum ilegal realizado en el año 2017, por los políticos catalanes.
De esta forma, la ley de amnistía, ha sido la protagonista los dos días del pleno de la investidura, al que reprochó hasta los últimos instantes, la oposición de España encabezada Alberto Nuñez Feijoó, del Partido Popular (PP) y Santiago Abascal, del partido Vox (de la extrema derecha) y el Partido Unión del Pueblo Navarro (UPN), los únicos en criticarla amnistía.
Sánchez, en su discurso inicial, defendió la amnistía “en nombre de España y en defensa de la concordia entre españoles”, pero también dijo que, “es para acabar con el conflicto con Cataluña”. Y también compartió los diferentes planteamientos y programas que tienen para el gobierno que inicia desde hoy con un gobierno de coalición.
Además, anunció la gratuidad del transporte para menores de edad, jóvenes y desempleados, así como la extensión de la baja del IVA a alimentos hasta el mes de junio de 2024.
En su intervención e intercambios con los representantes y grupos parlamentarios, fue contundente y crítico contra la que él llama “derecha reaccionaría”, palabra que repitió en más de 20 ocasiones en su primera intervención ante los diputados, en la cual incluye a la derecha (PP) y extrema derecha (Vox).
Dura crítica opositora
Pero cuando les correspondió el momento a la oposición, fueron más férreos y duros en contra de Sánchez, en un discurso ya comenzado desde las calles en las protestas incitadas por ambos partidos en contra de la amnistía, donde se han escuchado palabras como dictadura, de corrupción, engaño, manipulación, etc., y pidiendo la repetición de un proceso electoral.
En este sentido, el líder del PP, Feijoó, empezó su intervención acusando a Sánchez de “corrupción política”, y pidió a Sánchez, ir nuevamente a la repetición electoral bajo el argumento que lo que ha llevado al congreso “no se votó en las urnas”. Mientras que Abascal fue más allá y comparó a Sánchez con Hitler y le acusó de estar dando un “golpe de Estado”. Y finalmente el diputado de UPN, Alberto Catalán, manifestó que “España no puede ser gobernada por aquellos que quieren acabar con ella” en clara alusión a los independentistas.
Por su parte, los partidos nacionalistas independentistas han sido muy críticos con la derecha española, con mayor dedicación con el PP, quienes le hicieron remembranzas del contexto que ha tenido dicha institución política y también les recuerda pactos que sostuvieron en el pasado con catalanes, vascos y el portavoz de Esquerra Republicana de Catalunya (ERC), quien leyó las declaraciones hechas por expresidentes del PP como Aznar, Casado y Rajoy, quienes aseguraban que “España se rompe”, dijo el catalán Gabril Rufian, quien les recordó que siempre han “dicho eso cuando han perdido”.
Mientras que Junts per Catalunya, con que el PSOE de Sánchez, negoció la amnistía, criticó al hoy presidente por ser muy endeble en sus explicaciones de la ley ante el pleno, dado que ellos, exigían que fueran más contundente y manifestaron que no van a renunciar a ser un país a través de su portavoz Miriam Nogueras.
Entre los dos partidos independentistas suman 14 votos, pero son indispensables para poder desarrollar esta legislatura, la cual no será nada fácil para él elegido presidente, según expertos españoles, dado que tanto Junts per Catalunya, ERC y PNV han dejado claro que tendrán que ir cumpliendo con los acuerdos para que en esa medida puedan los socialistas obtener los votos que necesiten para los procesos que se desarrollen en el parlamento español.
Finalmente los partidos Coalición Canarias y el BNG se han centrado en destacar los beneficios sobre los acuerdos que han suscrito con el gobierno.