Presidente de Paraguay dice que sigue ejemplo de Bukele para intervenir peligrosa cárcel Tacumbú

El mandatario paraguayo, Santiago Peña, dijo que la política de mano dura del presidente salvadoreño le inspiró para enviar a 1,500 policías y 1,000 militares a “poner orden” en la cárcel Tacumbú.

El presidente de Paraguay, Santiago Peña, confesó en una entrevista televisiva que un agresivo operativo en la principal prisión de su país fue inspirado en el trabajo del mandatario salvadoreño Nayib Bukele.

De acuerdo al gobernante de 45 años, quien asumió el Ejecutivo en agosto pasado, la “experiencia de El Salvador” ha servido de aliento para afrontar el crimen que se controlaba desde la prisión.

“La experiencia de El Salvador y de Nayib ha sido un factor de aliento para enfrentar a estos grupos criminales. El presidente Nayib Bukele es una figura que ha ganado preponderancia”, le dijo Peña a la CNN. 

En la operación en Asunción, la capital, murieron un policía y 11 reos.

“El Salvador antes de su llegada (de Bukele al gobierno) era el país de mayor criminalidad probablemente del mundo. Generó un cambio tremendo”, agregó.

La operación Temerario, en la que intervinieron 1,500 policías y 1,000 militares, fue llevada a cabo en la prisión Tacumbú, en donde las autoridades encontraron armas, drogas y celulares, con los que los prisioneros ordenaban desde las celdas la comisión de múltiples crímenes.

Además, 700 prisioneros fueron trasladados a otras penitenciarías, entre ellos el cabecilla de la banda criminal Clan Rotela.

“Habíamos identificado que si resolvíamos el problema  de las cárceles estábamos resolviendo gran parte del problema de criminalidad”.

La crisis carcelaria en este país es grave, de unos 17,000 prisioneros 11,000 están a la espera de condena y las penitenciarías carecen no solo de espacio, sino de condiciones mínimas para funcionar.

El presidente Bukele, el más popular de Latinoamérica y quien busca su reelección en medio de cuestionamientos de opositores, mantiene desde marzo de 2022 un régimen de excepción que suspende varias garantías constitucionales, pero que le ha servido para arrestar a unos 74,000 pandilleros, en medio de acusaciones de violaciones a los derechos humanos.

En septiembre pasado, durante la Asamblea General de la ONU, Bukele y Peña conversaron sobre diferentes temas.

 

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