El vicepresidente taiwanés Lai Ching-te partió el sábado rumbo a Paraguay en un viaje de siete días y que incluirá escalas en Nueva York y San Francisco en los Estados Unidos.
Para Lai es un viaje sensible que China ha condenado y los funcionarios taiwaneses temen que pueda provocar más actividad militar china alrededor de la isla gobernada democráticamente. Lai es además el candidato favorito para convertirse en presidente de Taiwán en las elecciones de enero.
Lai dijo que durante su estancia de dos días en Paraguay buscará oportunidades para ampliar la cooperación bilateral en educación, salud pública y otras áreas priorizadas por el nuevo presidente paraguayo Santiago Peña, y reunirse con expatriados taiwaneses con sede en América del Sur.
Está previsto que Las aterrice en Paraguay en la mañana del 14 de agosto (hora de la Asunción) y se reúna con el presidente saliente Mario Abdo Benítez y el sucesor de Benítez, Peña, respectivamente, el mismo día.
El 15 de agosto, Lai asistirá a la inauguración de Peña, donde se espera que se encuentre con altos funcionarios del gobierno o enviados de otros países. También celebrará una conferencia de prensa más tarde por la noche antes de partir hacia San Francisco en las primeras horas del 16 de agosto.
El vicepresidente y su delegación llegarán por primera vez a Nueva York el sábado por la noche (hora de Nueva York) para hacer una escala antes de dirigirse a Paraguay el domingo por la noche, de acuerdo con el último itinerario proporcionado por la Oficina Presidencial.
Lai dijo que buscará llamar la atención sobre la adhesión de Taiwán a la democracia, la libertad y los derechos humanos y los esfuerzos para contribuir a la paz y la estabilidad de la región del Indo-Pacífico.
El vicepresidente hará escala en San Francisco en la tarde del 16 de agosto a su regreso de América del Sur y partirá de la ciudad en las primeras horas del 17 de agosto sin pasar la noche.
Amenazas chinas
China, que ha denunciado el tránsito planificado de Lai en suelo estadounidense, dijo el viernes que llevaría a cabo tres días de ejercicios militares en el Mar de China Oriental a partir del sábado.
En respuesta al anuncio, el Ministerio de Defensa Nacional de Taiwán dijo más tarde ese mismo día que supervisaría de cerca la situación alrededor del Estrecho de Taiwán y tomaría las medidas adecuadas.
Un portavoz del Departamento de Estado de EEUU dijo que el tránsito de Lai en suelo estadounidense es “consistente con las prácticas de larga data, la naturaleza no oficial de nuestras relaciones con Taiwán y nuestra política única de China”.