El presidente electo de Guatemala, Bernardo Arévalo, responsabilizó a Consuelo Porras, la fiscal general, de provocar las condiciones que han llevado a la crisis de los bloqueos en Guatemala, insistió en que los encapuchados violentos en las manifestaciones son infiltrados que responden a “los corruptos” y se negó a condenar los trancones que tiene casi paralizado al país desde hace una semana.
En una entrevista con TV Azteca local, Arévalo dijo que el gobierno de Alejandro Giammattei debe sentarse a negociar con los organizadores de las protestas que comenzaron el lunes de la semana pasada.
Que el “gobierno se siente con el liderazgo de estos bloqueos (los 48 Cantones) y de manera negociada encontrar una solución”, dijo Arévalo en tono inalterable.
Como lo ha hecho en varias ocasiones, dijo que Porras ha asaltado el proceso electoral al abrir ilegalmente cajas con actas de las votaciones, al intentar cambiar o alterar los resultados de la voluntad popular y al emprender una campaña judicial que incluso puede cancelar su partido, Movimiento Semilla.
“Este es un momento donde todos tenemos que hablar, que actuar con calma y de manera pacífica”, insistió, aunque se negó a condenar los bloqueos que han generado millones de dólares en pérdidas a la empresa privada, que han complicado la movilidad de la gran mayoría de ciudadanos y que está complicando aún más una situación que ya era tensa.
— Azteca Noticias GT (@AztecaNoticiaGT) October 10, 2023
Arévalo insistió en que la violencia viene de infiltrados y retomó las afirmaciones del Ministerio de Gobernación en ese sentido.
“Estos infiltrados están penetrando en las plazas en todo el país, están penetrando a nivel de los bloqueos”.
— Azteca Noticias GT (@AztecaNoticiaGT) October 10, 2023
“El gobierno de la República debe reconocer que este asalto del Ministerio Público contra el proceso electoral debe cesar, porque eso es lo que reclama el pueblo de Guatemala en este momento”, añadió.