El canciller ruso, Serguéi Lavrov, visitará Nicaragua a finales de abril, en una gira por Latinoamérica que lo lleva a agradecer a los países aliados al gobierno de Vladimir Putin que no se han sumado a la ola de condenas por la invasión y la guerra con Ucrania.
En su viaje, Lavrov estará también en las naciones que conforman el eje: Cuba, Venezuela y Brasil.
La visita del ministro ruso ocurre en momentos en que una serie de documentos del Pentágono de Estados Unidos fueron filtrados y en estos se devela el interés de la dictadura de Daniel Ortega de prácticamente entregar Nicaragua a Moscú, un eterno aliado del sandinismo, y a China, el gigante asiático que le ha prometido mucha inversión al país centroamericano pero al que hasta el momento no le ha dado más que promesas.
“Siempre hemos abogado por el fortalecimiento de la cooperación ruso-latinoamericana sobre la base del apoyo mutuo, la solidaridad y la consideración de los intereses de cada uno”, dijo Lavrov.
Esta no es su primera visita a Nicaragua. El canciller ya estuvo ahí en 2010, 2013 y 2015.