Congreso de EEUU realiza audiencia sobre el caso del obispo nicaragüense preso por la dictadura

Congresistas abogan por la liberación de monseñor Rolando Álvarez, el prisionero político más emblemático del régimen.

El Comité de Asuntos Exteriores de la Cámara Baja del Congreso de Estados Unidos realizó este jueves una audiencia sobre el caso del obispo nicaragüense condenado a 26 años de cárcel por la dictadura, en la que congresistas y testigos hablaron sobre el escandaloso caso de un prisionero político que trasciende fronteras.

La audiencia titulada “Un llamado urgente para liberar al obispo Álvarez”, fue presidida por el representante Christopher Smith y en esta se abordó la situación que vive el país y el religioso.

Asistieron 3 testigos, quienes comparecieron protegidos por una mampara para evitar ser identificados, dado que aún estando en el extranjero temen por su seguridad y la de sus familias en Nicaragua.

Fueron 2 exprisioneros de conciencia y el padre de uno de ellos, quienes relataron los angustiosos días que vivieron a causa de la represión del régimen.

Dictadura de Nicaragua exhibe a un demacrado obispo Rolando Álvarez

Por su parte, la congresista María Elvira Salazar denunció el terror que se vive en Nicaragua y pidió que este sea escuchado. 

“Lo que es inconcebible es que el régimen de Ortega se atreva a meterse con la Iglesia, algo que ni el dictador Somoza hizo”, dijo.

Denunció que “(la dictadura) tiene tras las rejas a uno de los miembros más importantes de la Iglesia Católica desde hace un año”. 

Ante eso, de igual manera se cuestionó “mi pregunta es, ¿cómo Ortega sabe que puede hacerle eso a alguien tan importante en una institución que tiene el doble de popularidad que el régimen?”.

Reconoció que en estos casos lamentablemente la Iglesia no puede hacer ni promover cambios, porque su misión es meramente profética en el mundo. Aunque recordó que en su momento “el obispo Obando y Bravo logró que los sandinistas no ganaran el poder”.

Salazar se preguntó a sí misma, cuáles son los puntos vulnerables de Daniel Ortega y de Rosario Murillo, los cuales parecen no temerle a nada ni a nadie. “Si no le temen a Dios a quién le temen?”.

Salazar en su intervención, reafirmó el compromiso del Comité del hemisferio occidental de Derechos Humanos Globales y Organizaciones Internacionales de la Cámara de Representantes de Asuntos Exteriores de Estados Unidos para hablar con claridad ante la comunidad internacional.

“Nosotros no vamos a descansar y no vamos a olvidarnos que son dictadores desalmados y que se han robado el país, país que fue granero de Centroamérica y que tuvo democracia gracias al gobierno de Violeta Chamorro que escapó al lastre sandinista”, dijo.

La congresista, le recordó a los dictadores, que el poder que tienen usurpado y maniatado “no va ser para siempre y nosotros estamos comprometidos, los dos y el Comité de Relaciones Exteriores de los EEUU de que eso sea así”.

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