El presidente de Guatemala, Bernardo Arévalo, dijo en su gira por Europa que el crimen organizado y el narcotráfico que opera en Centroamérica y que ha calado profundamente en su país, son los dos retos más grandes que afronta su gobierno.
“El crimen organizado y el narcotráfico están empujando a los políticos en sus oficinas para que operen a su favor”, dijo el mandatario en la Conferencia Internacional de Seguridad celebrada en Múnich (Alemania).
De acuerdo a lo planteado por Arévalo, el crimen organizado ha permeado en diferentes escalas del Estado, desencadenando corrupción.
“El nivel de penetración del crimen en el sistema político es muy grande”, aseguró, refiriéndose a alcaldes y diputados plegados a los criminales.
Arévalo estuvo en el encuentro con el primer ministro de Bulgaria, Nikolai Denkov; la vicepresidenta de Transparencia Internacional, Ketakandriana Rafitoson, y el senador estadounidense Sheldon Whitehouse.
La principal bandera política del presidente progresista fue el combate a la corrupción, que según él impide el desarrollo del país.