Dictadura de Nicaragua sigue empeñando el país a China

El hijo de la pareja de dictadores, Laureano Ortega Murillo, asesor presidencial y encargado de las relaciones con China, encabezó la firma de los contratos.

El hijo de la pareja de dictadores nicaragüenses, Laureano Ortega Murillo (der) aplaude la firma de uno de los acuerdos con empresas chinas.

La dictadura de Daniel Ortega concretó el lunes seis acuerdos con compañías chinas en infraestructura, energía y salud, durante una reunión empresarial celebrada en Managua, informó el medio oficialista El 19 Digital.

Estos acuerdos consolidan aún más los lazos políticos y económicos entre el régimen represivo de Daniel Ortega y el gigante asiático, establecidos en 2021 tras el rompimiento de relaciones con Taiwán.

Laureano Ortega Murillo, asesor presidencial y encargado de las relaciones con China, encabezó la firma de los contratos en el evento celebrado en el Salón Darío del Centro de Convenciones Olof Palme.

Durante su intervención, Ortega Murillo agradeció al régimen de la República Popular China y destacó la importancia de la cooperación bilateral. “Agradecemos al Gobierno de China y a sus instituciones por aportar al crecimiento económico de Nicaragua, por cooperar con nuestro país de manera respetuosa y solidaria, y por trabajar juntos por el beneficio mutuo”, afirmó.

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Acuerdos estratégicos en infraestructura

Uno de los acuerdos más relevantes es con la empresa china CAMC, que estará a cargo de la construcción del puerto de Bluefields en el Caribe. Este proyecto busca mejorar la conectividad marítima del país y fortalecer el comercio internacional.

En tanto, la empresa ACTISA se encargará de construir un nuevo Mercado Oriental en Managua, el cual reemplazará al actual, considerado el más grande de Centroamérica pero con serios problemas de infraestructura. Ortega Murillo señaló que el nuevo mercado “representará un impulso para la economía popular y un espacio moderno para los comerciantes”.

Por su parte, China Communications Construction Company (CCCC) firmó un contrato para el desarrollo de una planta eólica en Estelí, al norte de Nicaragua. Este proyecto, con una capacidad proyectada de 55 MW, pretende estar terminado entre 2025 y 2026, y forma parte de los esfuerzos del régimen por diversificar la matriz energética del país.

Acuerdos en salud y tecnología

En el ámbito sanitario, la farmacéutica china Sinopharm firmó un convenio para el suministro de medicamentos y el diseño y construcción de un centro regional de producción y distribución de fármacos en Nicaragua. “Este acuerdo permitirá fortalecer nuestro sistema de salud y convertir a Nicaragua en un hub de distribución de medicamentos para Centroamérica”, afirmó Ortega Murillo.

Además, recientemente el régimen dictó una normativa que obliga a las instituciones públicas a adquirir tecnologías exclusivamente chinas, lo que ha sido interpretado como una señal del distanciamiento comercial de Nicaragua respecto a Estados Unidos y el Tratado de Libre Comercio con ese país.

Contexto de las relaciones con China

La relación entre ambos gobiernos se fortaleció tras el rompimiento diplomático con Taiwán en 2021, cuando Nicaragua reconoció a Pekín como el único gobierno legítimo de China. En enero de este año, se puso en marcha un Tratado de Libre Comercio que ha facilitado la entrada de productos y empresas chinas al mercado nicaragüense.

Ortega Murillo resaltó el compromiso de ambas naciones por ampliar la cooperación económica y política. “La participación plena de las empresas chinas en nuestra economía no solo beneficia a Nicaragua, sino que también abre puertas para que estas compañías operen en toda la región centroamericana”, destacó.

Mientras el régimen de Ortega profundiza sus lazos con Pekín, expertos advierten que estas alianzas comprometen aún más la soberanía del país y generan una creciente dependencia económica y tecnológica hacia China.

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