El canciller de Guatemala, Ramiro Martínez, dijo que el secretario de Estados Unidos, Marco Rubio, tiene un panorama claro sobre la corrupción que se vive en el país centroamericano, los intentos de desestabilización impulsados desde organismos estatales, como el Ministerio Público, y del compromiso del gobierno de Bernardo Arévalo con la democracia.
En una entrevista con Emisoras Unidas, el funcionario sostuvo que durante las reuniones con Rubio se abordaron estos temas y aunque no fue sobre casos específicos, se mencionó lo nocivo que son para el país.
Hay preocupaciones sobre el impacto de esta problemática en la economía y el desarrollo, agregó.
En una reunión privada con el presidente Bernardo Arévalo, el embajador estadounidense Tobin Bradley y el canciller de Guatemala, se discutieron diversos temas, incluyendo la corrupción y la desestabilización institucional.
El canciller Martínez destacó que Rubio mostró un conocimiento profundo sobre la situación de la corrupción en Guatemala, señalando cómo ha desviado recursos destinados al desarrollo e infraestructura.
“Se habló de desestabilización, que es muy evidente, que no me corresponde a mí señalar qué instituciones del Estado lo están promoviendo, pero el escenario el secretario Rubio y su gente lo tienen claro”, explicó.
Aunque el término “pacto de corruptos” no se mencionó directamente, la conversación giró en torno a los efectos negativos de la impunidad en el país.
Otro de los puntos clave de la reunión fue la preocupación por la desestabilización institucional.
Rubio y su equipo dejaron claro que tienen una visión bien informada de la situación política del país.
“Ese comentario de Rubio sobre no invertir en un país donde podría haber un golpe de Estado dice mucho”, indicó el canciller Martínez, subrayando que la falta de certeza jurídica y el debilitamiento del Estado de derecho afectan la inversión extranjera.
En sus declaraciones públicas, Rubio reafirmó su apoyo al sistema democrático guatemalteco y el respeto al proceso electoral.
“No se trató de un espaldarazo a Arévalo, sino de un respaldo a la democracia y de manera implícita, una condena a cualquier intento de desestabilizar al país”, explicó Martínez.
Sobre el tema de las sanciones impuestas a funcionarios y empresarios guatemaltecos a través de la Lista Engel, Rubio dejó en claro que su revisión no es una prioridad en este momento, aunque podría evaluarse en el futuro.
“Fue claro al decir que en este momento no era una prioridad la revisión de esas listas y en su momento será parte de un proceso de análisis”,