El Periódico, el diario guatemalteco que dirige el periodista José Rubén Zamora Marroquín, encarcelado desde el 29 de julio pasado tras un proceso judicial catalogado como persecución a los medios críticos al gobierno de Alejandro Giammattei, dejará de circular de manera impresa el próximo 1 de diciembre, según anunció el propio medio.
Sin embargo, El Periódico mantendrá las suscripciones digitales y del PDF activas, innovando con las herramientas propias de los tiempos.
“Los últimos 111 días han sido una de las temporadas más difíciles que ha enfrentado elPeriódico como medio de comunicación”, dijo el medio en una carta dirigida a sus lectores.
“Desde el 29 de julio ha experimentado una escalada nunca antes vista en contra del medio y la libertad de prensa en Guatemala. Represión, intimidación, expansión del boicot comercial, allanamientos ilegales, detenciones y miembros del equipo en prisión preventiva o que se han visto obligados a salir del país en las últimas semanas debido al contexto actual de nuestro país”, explica el diario.
El Periódico hará seis ediciones especiales, que se entregarán a todos los suscriptores de la edición impresa durante diciembre. Pero elPeriódico mantendrá las suscripciones digitales y del PDF activas, entendiendo que muchos de sus suscriptores degustan la lectura del diario en este formato.
“elPeriódico continuará ejerciendo un periodismo comprometido con profundizar la democracia y el libre mercado, la justicia y libertad en un contexto de igualdad de oportunidades”, expresa la Redacción del diario en su comunicado.
Zamora, de 65 años, ha sido un periodista crítico del actual gobierno y gobiernos anteriores de Guatemala. Zamora ha recibido varios premios durante su carrera, como el reconocimiento de Héroe de la Libertad de Prensa que en el años 2000 le dio el Instituto Internacional de la Prensa.
Durante años, Human Rights Watch ha denunciado amenazas, ataques e intimidaciones a varios periodistas guatemaltecos, entre ellos Zamora.
Las autoridades dicen que Zamora es sospechoso de estar involucrado en un caso de lavado de dinero, acusación que se ha vuelto frecuente contra periodistas críticos en los países centroamericanos.