El exjefe del Ejército nicaragüense y hermano del dictador Daniel Ortega, Humberto Ortega, falleció esta madrugada de un paro cardiorespiratorio, informó el Ejército de Nicaragua en un breve comunicado.
Humberto Ortega, quien fue arrestado en mayo pasado por las fuerzas de seguridad de la dictadura tras hacer críticas al régimen y al proceso de sucesión de su hermano, estaba internado en el Hospital Militar, donde fue declarado muerto a las 2:30 am de este lunes 30 de septiembre.
Según el comunicado, el general retirado de 77 años presentó un paro cardio respiratorio a la 1:55 de la madrugada y luego de atenderlo con maniobras de resucitación, no salió de tal condición.
El domingo, el Ejército había informado que Humberto Ortega enfrentaba una grave crisis de salud mientras permanecía bajo custodia en el Hospital Militar Dr. Alejandro Dávila Bolaños.
Ortega había sido ingresado el pasado 11 de junio con un cuadro severo de disnea progresiva, hipotensión y signos de sepsis, agravados por múltiples condiciones de salud preexistentes, como hipertensión arterial crónica, diabetes tipo 2 y falla cardíaca.
Según el informe militar, a pesar de haber mejorado tras un tratamiento inicial en cuidados intensivos, el exmilitar sufrió un brusco deterioro el 29 de septiembre, lo que obligó a su reingreso a la unidad de terapia intensiva debido a un choque cardiogénico y alteración de la consciencia.
Humberto Ortega, miembro de la histórica Dirección Nacional del Frente Sandinista, fue jefe del Ejército entre 1979 y 1994 cuando fue destituido por la entonces presidenta Violeta Chamorro.
Desde entonces se distanció del partido sandinista y esporádicamente criticaba a su hermano y a su cuñada, Rosario Murillo. Solía codearse con empresarios e intelectuales.
Humberto Ortega se encuentra bajo un régimen de “casa por cárcel de facto” desde mayo de 2024, cuando la dictadura de su hermano lo puso bajo custodia después de que el exgeneral ofreciera una entrevista al medio argentino Infobae.
En esa ocasión, criticó la falta de sucesores adecuados para su hermano Daniel Ortega, lo que provocó la molestia de la co dictadora Rosario Murillo, quien ordenó su arresto.
La medida de vigilancia fue impuesta tras la publicación de la entrevista, cuando la policía del régimen cercó la vivienda de Ortega y lo despojó de sus computadoras y celulares.