El gobierno de Xiomara Castro por medio de la secretaría de Gobernación pretende seguir el guión de la dictadura nicaragüense y llevar a cabo una arremetida contra ONG de todo tipo, alegando incumplimientos legales de estas entidades.
Las organizaciones sin fines de lucro tenían hasta el 31 de marzo de este año para presentar sus estados financieros y renovar sus directivas, pero según el Ejecutivo, muchas de estas incumplieron los requisitos, por lo que podrían ser canceladas.
Extraoficialmente se conoció que unas 5,000 ONG serían suspendidas.
Entre las entidades afectadas hay medioambientales, religiosas, de asistencia social y económica.
“El gobierno tomará medidas contundentes en contra de aquellos que han abusado de su posición y han utilizado fondos estatales para fines personales o políticos”, dice un comunicado del gobierno.
A finales de abril presentarán el informe en el que se detallan todas las organizaciones que según el Ejecutivo han incumplido con los requisitos legales.
La arremetida contras las ONG ocurre en medio de un tenso clima social, marcado por la incesante violencia, protestas de trabajadores, rumores de un potencial autogolpe del gobierno y las acusaciones de la presidenta Xiomara Torres de que los conservadores conspiran contra ella.