El hombre fuerte del oficialismo hondureño, Manuel Mel Zelaya, el esposo de la presidenta y quien está salpicado por el narcoescándalo que ha desatado un terremoto político, dijo tener limpias sus manos y sus finanzas y que nunca ha recibido dinero del crimen organizado y prácticamente lanzó al fuego a su hermano, Carlos, quien se reunió con capos de las drogas de su país.
“Tampoco puedo responder por la conducta abominable de otra persona, aunque sea familiar”, aclaró en un mensaje en la red social X.
“No tengo delitos ni dinero proveniente del narcotráfico en mis 72 años de vida. Quien afirme lo contrario lo hace con un mezquino interés y está mintiendo”, dijo en un mensaje publicado en la red social X.
No tengo delitos ni dinero proveniente del narcotráfico en mis 72 años de vida. Quien afirme lo contrario lo hace con un mezquino interés y está mintiendo. Mi vida de lucha junto a Xiomara en las calles por más de 44 años siempre será un testimonio moral y un ejemplo para las…
— Manuel Zelaya R. (@manuelzr) September 5, 2024
A mis detractores, les advierto que pueden dar rienda suelta a sus ataques en las redes sociales o en los medios corporativos, pero no cambiaré mi compromiso con el socialismo frente a las políticas equivocadas e imperiales de Estados Unidos que se implementan en Honduras.
El narcovideo de una reunión con 2 de los cabecillas de los Cachiros, un cartel local, evidencia a Carlón, como le llaman al exdiputado oficialista, negociando financiamiento para la campaña electoral de Libre en 2013.
“Mi vida de lucha junto a Xiomara en las calles por más de 44 años siempre será un testimonio moral y un ejemplo para las presentes y futuras generaciones”, dijo Mel, en un arranque poético para lavarse las manos.
PRevio a que se filtrara el video, Carlos renunció como secretario del Congreso Nacional y diputado, mientras que su hijo, José Manuel Zelaya, lo hizo como ministro de Defensa.