Obispo auxiliar de Managua respalda decisión de monseñor Álvarez de rechazar ser liberado y desterrado

Desde el exilio, monseñor Silvio Báez, dijo que apoya la determinación de Rolando Álvarez de no abandonar su país y hasta sostiene que él debió haber hecho lo mismo y no salir de Nicaragua exiliado.

El obispo auxiliar de Managua, el exiliado Silvio Báez, externó su apoyo a monseñor Rolando Álvarez, quien a punto de ser liberado de la cárcel fue devuelto a una celda por la dictadura de Nicaragua, por negarse a ser desterrado.

“No hay nada que negociar. Conozco a Rolando y nunca negociará una decisión de conciencia que ha tomado y que yo comprendo plenamente”, escribió Báez en una sentida reflexión que compartió la noche de este miércoles en su cuenta en Twitter.

Incluso, el obispo auxiliar confiesa que él debió haber “actuado igual, aún pagando un precio de dolor”, pero sostiene que abandonó Nicaragua en 2019 porque el Papa se lo mandó.

“Comprendo la dolorosa decisión que ha tomado mi hermano obispo y lo apoyo. Como ciudadano inocente tiene derecho a vivir libre en su país”, escribe.

En su reflexión, Báez se compromete a continuar exigiendo la liberación de monseñor Álvarez, el prisionero político más emblemático que tiene la dictadura de Daniel Ortega.

Desde la tarde del 4 de julio se especuló con la liberación del religioso, incluso fuentes diplomáticas en Managua confirmaron la excarcelación; sin embargo, esta fue desmentida este miércoles.

Horas después se conoció que Álvarez, prisionero desde agosto de 2022 y condenado a 26 años de cárcel, decidió no negociar su liberación por resistirse a ser desterrado.

El 9 de febrero, el obispo de Matagalpa decidió no salir de prisión junto a 222 prisioneros políticos más, porque se niega rotundamente a ser exiliado.

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