La organización política opositora en el exilio Monteverde calificó este lunes como “ilegal, inconstitucional y nula” la nueva Constitución aprobada por la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo en Nicaragua.
Según los opositores, esta reforma concentra el poder absoluto en una Presidencia bicéfala, suprime el Estado de derecho y consolida un modelo dinástico que perpetúa a la familia Ortega Murillo en el poder.
“La nueva Carta Magna no expresa la voluntad popular. Los nicaragüenses fuimos negados del derecho a participar en su redacción mediante consulta ciudadana y en su ratificación a través de un referéndum”, afirmó Monteverde en un comunicado oficial.
Posicionamiento de la CDN – Monteverde sobre la Reforma Constitucional en Nicaragua https://t.co/ec6QQiPB5t
— La Mesa Redonda (@lamesaredondan1) January 13, 2025
Además, destacaron que el proceso de aprobación fue liderado por un poder Ejecutivo y un Parlamento elegidos en comicios en 2021 que la Organización de Estados Americanos (OEA) ha considerado ilegítimos.
Monteverde subrayó que la nueva Constitución rompe con el modelo republicano democrático, al concentrar y subordinar todos los poderes del Estado a la Presidencia.
“Esta reforma busca legitimar un modelo represivo y sistemático de violación a los derechos humanos, garantizando el control absoluto de las fuerzas armadas y los órganos del Estado por parte del régimen”, señaló la organización.
La Asamblea Legislativa, bajo absoluto control de la dictadura Ortega Murillo, anunció que durante todo el mes de enero de 2025 continuará con el proceso de aprobación de la reforma constitucional en segunda legislatura, un trámite que los opositores califican como una “simulación legal” para consolidar el poder autoritario del régimen.
Monteverde denunció además que la reforma asegura la sucesión dinástica de la familia Ortega Murillo y fortalece su estrategia de control total sobre la sociedad nicaragüense.
“Nicaragua ha sido convertida en un Estado forajido que viola tratados internacionales y compromisos en materia de derechos humanos”, advirtió la organización.
La oposición en el exilio reiteró su compromiso con la resistencia democrática y llamó a la comunidad internacional a intensificar las medidas contra el régimen, a fin de detener lo que consideran un golpe definitivo contra la democracia en Nicaragua.