El presidente de Guatemala, Bernardo Arévalo, denunció que el jefe de la Superintendencia de Administración Tributaria (SAT), Marco Livio Díaz Reyes, es perseguido por los corruptos, en referencia a una investigación impulsada por el Ministerio Público, mientras la fiscalía allanó el despacho contable del hermano del funcionario.
Además, Díaz se ausentó de sus funciones con un permiso temporal y asumió como interino Armando Gabriel Pokus.
Hoy la afrenta es contra Marco Livio Díaz, un funcionario cuyo profesionalismo se demuestra en el éxito y prestigio que tiene hoy la SAT.
Guatemala merece una justicia que proteja a quienes denuncian valientemente la corrupción, y no al revés. Este sinsentido debe detenerse,…
— Bernardo Arévalo (@BArevalodeLeon) December 5, 2024
El cambio de mando ocurre en medio de una controversia, después de que Díaz Reyes revelara públicamente que está siendo investigado por el Ministerio Público, a través de la Fiscalía Contra la Impunidad (Feci). Esta investigación ha provocado una serie de reacciones.
“Hoy la afrenta es contra Marco Livio Díaz, un funcionario cuyo profesionalismo se demuestra en el éxito y prestigio que tiene hoy la SAT”, expresó Arévalo en redes sociales, agregando que Guatemala necesita una justicia que proteja a quienes denuncian valientemente la corrupción, y no que favorezca a quienes intentan silenciarlos.
El presidente hizo un llamado a detener lo que consideró un “sinsentido”, resaltando que el país entero pierde ante un sistema que está “coartado y ciego ante la corrupción”.
Marco Livio Díaz Reyes fue electo para ocupar el cargo de superintendente de la SAT en 2020 por un periodo de cinco años, y su mandato está previsto que concluya el próximo 16 de abril.
La Feci registra despacho
La Fiscalía Especial contra la Impunidad (Feci) allanó las oficinas de la empresa Moore Díaz Reyes y Asociados, como parte de una investigación que se inició hace 4 meses por denuncias de que en la Superintendencia de Administración Tributaria (SAT) refirieron a muchas empresas a una firma de auditores para solventar su situación tributaria, informó el Ministerio Público.
#AHORA Declaraciones del jefe de la FECI, Rafael Curruchiche: “Quiero ser muy enfático y claro en que esta investigación no tiene nada que ver con el caso B410, y por eso me extraña la postura que ha asumido el señor Presidente de la República (Bernardo Arévalo) (…) Llamo a… pic.twitter.com/nbpYBhqRDt
— Emisoras Unidas (@EmisorasUnidas) December 5, 2024
El jefe de la Feci, Rafael Curruchiche, dijo que la investigación “no tiene absolutamente nada que ver” con el caso B410, el cual es investigado por la Fiscalía de Delitos Económicos y, por lo tanto, manifestó “sentirse sorprendido por la actitud asumida por el licenciado Marco Livio Díaz Reyes, superintendente de la SAT, y por el Gobierno de la República, respecto de este caso”.
“Marco Livio Díaz Reyes no está siendo investigado, la firma de auditores sí, por lo que me sorprende que el propio gobierno y muchas personas afines a él salgan a defender algo de lo cual no tienen conocimiento”, indicó Curruchiche.
“Quiero dejar bien claro que son casos totalmente distintos. Es mentira que con esta diligencia se pretende que no se siga investigando el caso B410 como lo afirman personas afines al gobierno; de hecho, ayer el propio secretario de Comunicación Social de la Presidencia y hoy el presidente de la República hacen señalamientos con total desconocimiento de la investigación”, agregó.
Dijo que la investigación a la firma de auditores Mooore Díaz Reyes y Asociados es porque algunas empresas estaban logrando descuentos en la SAT.
“Si en el curso de la investigación no existe mayor sustento, se tomará la decisión que corresponda”, apuntó.
Agregó que contra Díaz Reyes no hay orden de captura.