Estados Unidos volvió a urgir el respeto a la democracia guatemalteca y exigió que pare el “asalto” a esta, a lo que el Ministerio Público, el señalado como villano en el proceso electoral, respondió que su actuar está dentro del marco legal.
Por medio de la red social X el representante permanente ante la OEA, Frank O. Mora, publicó que el país centroamericano “debe cumplir con los compromisos adquiridos bajo la Carta Democrática de la OEA y asegurar una transición de poder fluida y pacífica. La defensa de los principios democráticos no es negociable. La colaboración con los socios regionales es clave para defender la democracia y la rendición de cuentas”.
“La intimidación a las autoridades electorales y el partido Semilla tiene que parar. Manipular las cajas electorales selladas es un asalto a la democracia y al estado de derecho”, agregó.
Reiteramos comunicado del 13/09/23: Cumplir la orden de juez, en los términos en que se han realizado las diligencias, no significa ningún rompimiento del orden constitucional, sino por el contrario, https://t.co/3RpCufgH1o
— MP de Guatemala (@MPguatemala) September 19, 2023
Los mensajes fueron reposteados por la embajada de Estados Unidos en Ciudad de Guatemala y sólo 75 minutos después la cuenta del Ministerio Público respondió al mensaje alegando que “cumplir la orden del juez, en los términos en que se han realizado las diligencias, no significa ningún rompimiento del orden constitucional, sino por el contrario… el debido cumplimiento de las funciones que la Constitución y la ley le confieren al Ministerio Público para la investigación”.
Retomó un comunicado del 13 de septiembre, en el que justificó los allanamientos a dependencias del Tribunal Supremo Electoral, en las cuales confiscó y abrió 70 cajas que contienen actas y resultados de votaciones, calificado como “inaudito y atentatorio”.
Este es un nuevo capítulo de acusaciones contra un Ministerio Público que cada día está más acorralado por los señalamientos de diferentes instituciones, organismos y gobiernos amigos, pero que se resiste a abandonar su persecución judicial contra el partido Movimiento Semilla, del presidente electo.