El jefe de la diplomacia estadounidense para las Américas, Brian Nichols, manifestó este fin de semana su preocupación por la persecución de periodistas y operadores de justicia en Guatemala, así como por los presos políticos en Nicaragua.
En el marco del Día Internacional de los Derechos Humanos, el subsecretario de Estado de los Estados Unidos para asuntos hemisféricos, Brian Nichols, exigió “el derecho de Libertad de expresión, juicio justo y la libertad para que los operadores de justicia puedan procesar casos y pedir rendición de cuentas al gobierno guatemalteco”.
“Nos preocupa profundamente la persecución en Guatemala de periodistas y operadores de justicia, como Virginia Laparra, identificada por Amnistía Internacional como prisionera de conciencia”, subrayó Nichols.
Laparra, una exfiscal guatemalteca que procesó importantes casos de corrupción, ha sido procesada y organismos de Derechos Humanos la señalan como un símbolo de la persecución política contra jueces y fiscales que combaten la corrupción en Guatemala.
Nichols también señaló su preocupación por los presos políticos en Nicaragua, Cuba y Venezuela.
“Músicos. Políticos. Artistas. Hermanos. Hermanas. Padres. Hijas. Hijos. ¿Su delito? Hablar en favor de la democracia, los Derechos Humanos y el Estado de derecho en Cuba, Venezuela y Nicaragua. Unámonos para alzar la voz hasta que estos presos políticos sean liberados”, escribió Nichols en Twitter.
“En estos momentos hay más de 1.400 personas detenidas injustamente en Cuba, Nicaragua y Venezuela. Este es el coste de la disidencia en estos países. Seguiremos alzando la voz por ellos, por la democracia, por el derecho a la libertad de expresión, hasta que sean liberados”, agregó el diplomático estadounidense.
En el caso nicaragüense, la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo mantiene en prisión a unos 235 presos políticos que incluyen a líderes políticos, empresariales, estudiantiles, feministas y campesinos, así como al obispo católico Rolando Álvarez y una docena de sacerdotes, seminaristas y laicos católicos.