Dos semanas después de la suspensión del programa de reasentamiento y refugio a Estados Unidos, firmado por el presidente Donald Trump, miles de solicitantes de tales programas migratorios han empezado a recibir correos formalizando el cierre de los trámites y asistencia de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) y Oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR).
La carta ha sido enviada masivamente desde el día miércoles 29 de enero, a solicitantes de refugio radicados en Ecuador, Colombia, Costa Rica y Guatemala.
Estas comunicaciones se han dirigido a venezolanos, nicaragüenses, ecuatorianos y guatemaltecos que participaban del programa Movilidad Segura, que lanzó el ex presidente Joe Biden en febrero de 2023.
Las cartas básicamente dicen que ambas organizaciones, OIM y ACNUR, no pueden procesar los casos de reasentamiento o proporcionar otras vías de ingreso a Estados Unidos, tras la orden ejecutiva de Trump del 20 de enero de 2025, cuando suspendió el programa por 90 días.
Tras disculparse, las dos organizaciones alientan a los migrantes a aplicar a los programas de legalización, asilo o refugio en los países donde permanecen.
Las quejas, lamentos y llantos de decenas de miles de personas que esperaban viajar a Estados Unidos, se han hecho sentir en las redes sociales.
“Desde junio de 2023 esperando una respuesta, yendo a charlas, a exámenes médicos, a entrevistas y todo para que al final le digan a uno que rehaga su vida en Costa Rica”, se quejó Maritza, una nicaragüense que esperaba viajar con sus dos hijas.
La suspensión del programa deja a más de 60,000 personas en el limbo, según datos extraoficiales de una organización de apoyo a migrantes en San José, misma que ahora ha visto afectada su capacidad de apoyo por el cierre de la cooperación de Trump a los organismos no gubernamentales.