El Ministerio de Salud de Guatemala anunció que mantiene activada la vigilancia del COVID-19, ante la amenaza de una nueva variante de esta enfermedad que está afectando en otros continentes.
Según las autoridades sanitarias la nueva subvariante es la Ómicron XBB1.1.6, que actualmente afecta a Norteamérica, Asia y Europa.
Esta, dicen, es “altamente contagiosa”, pero no representa, en general, complicaciones de salud que pongan en riesgo de muerte a quien la contrae.
En Guatemala circula desde hace algunos días la subvariante BB1.1.5.
Según el informe y de acuerdo al comportamiento de años anteriores, entre junio y agosto podría ocurrir un incremento en el índice de contagios diarios.
Aunque la enfermedad dejó de ser una grave amenaza, Salud recomienda utilizar mascarilla, las medidas higiénicas y evitar las aglomeraciones, las medidas preventivas que se pusieron de moda cuando apareció la enfermedad en marzo de 2020 en el país y la región. Al 31 de mayo de este año, Guatemala reportaba 20,000 fallecidos por COVID y poco más de 1.2 millones de contagios.