Pacientes con padecimientos renales crónicos y algunos de sus familiares bloquearon una carretera en la capital de Honduras, para reclamar una pronta atención médica y tratamientos de calidad, lo que provocó enormes problemas viales durante la mañana de este martes.
La ministra de Salud, Carla Paredes, respondió a las protestas diciendo que “sus aliados somos nosotros, los que estamos interesados en mantenerlos vivos, somos nosotros. Esa es nuestra prioridad ¿Por qué piensan que somos el enemigo?”.
#HCHNoticias | La protesta de pacientes renales no cesa en la carretera CA-5, a la altura de El Durazno; no obstante, se habilitó uno de los dos carriles que de Tegucigalpa conduce al norte de Honduras, y se prevé que también se habilitará un carril de ingreso a la capital.… pic.twitter.com/g4cm4Fkax6
— HCH Televisión Digital (@HCHTelevDigital) April 9, 2024
Según la funcionaria, la protesta es por 3 situaciones “que tienen resueltas”, dijo.
“Vengan, pero no comprometan su salud”, les insistió.
De acuerdo a la funcionaria, en este 2024 resolverían la situación para la atención de pacientes con problemas renales al contratar los servicios para que sean atendidos “debidamente”.
“Se ha mejorado (la atención) con el rompimiento del monopolio (que había en Salud), ha sido difícil”, explicó.
Los protestantes, quienes colapsaron el tráfico durante horas, dijeron que la medida es de presión ante la negativa de la Secretaría de Salud de atenderlos.
Exigieron que les regresen el contrato a la empresa que les daba sus tratamientos en Tegucigalpa.