La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), compartió un preocupante informe que relata la situación de los derechos humanos que viven los defensores del medio ambiente en El Salvador, Honduras y Guatemala, una de las zonas más peligrosas del mundo y de la región para los activistas.
“Desde hace al menos 5 años, se ha sostenido un número alarmante de asesinatos de personas defensoras del medio ambiente en Honduras y Guatemala. A su vez, la criminalización de este tipo de defensa, a través del uso indebido del derecho penal, ha sido una práctica comúnmente utilizada en el Norte de Centroamérica y que ha aumentado en los últimos años”, dice la Comisión.
Esta situación preocupa al organismo internacional por las violaciones de derechos humanos y el impacto social que ello conlleva. Estos acontecimientos profundizan más los problemas de desigualdad, pobreza, inseguridad ciudadana y la falta de implementación de políticas pertinentes al contexto.
Al respecto la CIDH comparte que “dentro de la defensa del medio ambiente, la tierra y el territorio, existen ciertos grupos expuestos a una situación de mayor riesgo, tales como mujeres y personas defensoras indígenas y afrodescendientes.
Las condiciones de vulnerabilidad bajo la cual estos grupos ejercen la defensa del medio ambiente se agravan ante factores estructurales como la discriminación étnica y racial, y los niveles de marginación, pobreza, desigualdad y exclusión social que históricamente les han afectado”. Además, para el organismo estos acontecimientos se dan en un contexto donde hay iniciativas que restringen el orden democrático.
La CIDH relata que este tipo de procesos sociales registra uno de los hechos de violencia más impactantes, ya que estas personas ven sus derechos amortizados con mayor fuerza con la presencia de megaproyectos y explotación de recursos naturales relacionados con la industria minera, hidroeléctrica, agrícola, la tala forestal desmedida o ilegal y los desarrollos turísticos o urbanos.
Ante ello, la preocupación de la Comisión es que tampoco se muestran avances en las investigaciones sobre los delitos que se han cometido en contra de los activistas, lo cual refleja la impunidad y el desapego al orden legal, lo que deja abierto el camino para que este tipo de hechos se continúen cometiendo.
En el documento compartido se aprecia que estos grupos son víctimas de discursos estigmatizantes, sufren hostigamiento y generalmente viven bajo amenaza constante, los cuales muchas veces trascienden y se constituyen en atentados con la integridad y la vida de estas personas, y con ello se terminan registrando asesinatos y desapariciones forzadas.
“Las personas defensoras de la tierra, el territorio y el medio ambiente desempeñan un rol fundamental para el desarrollo de políticas y estrategias de protección del medio ambiente a fin de lograr un desarrollo sostenible. Por ello, los hechos de violencia contra estos colectivos no solo afectan sus garantías como personas individuales, sino también socavan el rol que juegan dentro de las sociedades de los Estados del Norte de Centroamérica y de la comunidad internacional”, afirma.
Mujeres víctimas
En Guatemala se registraron al menos 18 ataques en contra de defensoras de la tierra, el territorio y el medio ambiente durante 2021.
En cambio en Honduras, una de cada tres defensoras asesinadas defendía la tierra, territorio, agua o bienes comunes. Entre 2020 y marzo del 2022, se reporta que 4 fueron asesinadas, dos de ellas defensoras garífunas.
El Salvador a pesar que registra riesgos particulares, “la violencia contra las defensoras del medio ambiente y el agua no proviene únicamente del Estado, empresas y/o cuerpos de seguridad, sino también de sus comunidades y familias resultado de una cultura machista y patriarcal que prevalece dentro de la sociedad”, según el informe.
Total de asesinatos
Guatemala
El organismo afirma que el 2018 ha sido el más mortífero para los defensores en Guatemala con 26 personas asesinadas, aunque reconoce que otras instancias de la sociedad civil registran estimaciones de 77 personas fallecidas entre el 2012 y 2020. A esto la Comisión suma que entre el 2018-2022 al menos 23 integrantes del Comité de Desarrollo Campesino (CODECA), organización dedicada a defender los derechos de las comunidades campesinas, han sido asesinados.
Honduras
Durante el primer cuatrimestre del 2022 se documentaron 5 asesinatos contra activistas, mientras que en el 2021, la CIDH cita que la OACNUDH, registró al menos 10 personas murieron en circunstancias violentas durante, 6 de las cuales defendían el medio ambiente y el territorio. En cambio las organizaciones de sociedad civil reportaron 8 asesinatos de activistas en el mismo período, destacando los atentados contra la vida de líderes indígenas y afrohondureños.
Asimismo la Comisión comparte datos de la Global Witness, que registró en el 2020, al menos a 17 personas asesinadas vinculadas a la defensa del medio ambiente, la tierra y sus recursos naturales en Honduras. Este tiempo ha sido el año más violento para quienes desempeñan este tipo de defensa, luego de que en 2019 se registraron 14 asesinatos. Sin embargo, la sociedad civil indica al menos 109 personas muertas entre los años de 2012 y 2020, siendo considerado como el país más peligroso en el mundo para este tipo de defensa si se consideran los asesinatos per cápita acumulados.
El Salvador
Se han registrado casos de asesinatos contra personas que defienden el medio ambiente, la tierra y sus recursos naturales en menor medida. Y se reconocen al menos dos asesinatos entre el 2018 y 2019.