La cifra de homicidios en Costa Rica se viene incrementando considerablemente mes a mes, al parecer sin soluciones efectivas de las autoridades locales. Sólo en los primeros 10 días de junio se cometieron 33 asesinatos.
De acuerdo con cifras oficiales del Organismo de Investigación Judicial (OIJ), hasta el 31 de mayo la cifra de homicidios cerró en 358.
Para el 7 de junio había crecido a 380 casos, en un incremento brutal que empeoró con una ola de violencia el fin de semana del 8 y 9 de junio.
Según la Cruz Roja costarricense, el recién pasado fin de semana se reportaron 20 muertes dentro de las atenciones de emergencia, de los cuales 11 fueron a balazos y con armas blancas, que califican como homicidios.
Además, se reportaron 7 personas desaparecidas y evidencias de violencia fatal (sangre, disparos, huellas de violencia en las provincias de Limón, Puntarenas, Cartago y Alajuela, que no fueron formalmente reportadas al servicio de emergencia.
Con los 11 casos reportados por la Cruz Roja, la cifra se elevó provisionalmente a 391 homicidios en lo que va del año en Costa Rica.
Hasta ahora, junio se viene proyectando como el mes más violento del año.
Solo en los primeros 10 días de junio se han reportado 33 homicidios, a un promedio de 3.3 homicidios por día, una tasa elevada en comparación a otros meses del año.
La elevada ocurrencia de homicidios ha alertado a las autoridades que ya proyectan un año sangriento como lo fue 2023, cuando se marcó la cifra récord de 907 homicidios.
Costa Rica sufre una inédita ola de violencia por la incidencia de los carteles de las drogas y bandas de sicarios que disputan territorios, rutas y zonas de almacenamiento de drogas.