Costa Rica y Panamá a la cabeza en Centroamérica en percepción de aumento en la criminalidad

Un reporte de CID-Gallup indica que en estas 2 naciones los ciudadanos están convencidos que el crimen ha subido. El Salvador es donde menos se reporta esa percepción.

Costa Rica y Panamá son los dos países centroamericanos donde la población percibe que más está creciendo el crimen y la inseguridad, de acuerdo a una medición de la firma CID-Gallup.

Según el reporte, el 82 % de los costarricenses considera que los delitos han aumentado, mientras que el 72 % de los panameños opina lo mismo respecto a su país.

En tercer lugar está Nicaragua, nación donde el 55 % estima que hay más crimen y en cuarto Guatemala con un 54 %, mientras que al otro extremo está El Salvador, donde sólo el 3 % habla de un aumento de delincuencia.

Costa Rica y Panamá son los dos países centroamericanos donde la población percibe que más está creciendo el crimen y la inseguridad, de acuerdo a una medición de la firma CID-Gallup.

Según el reporte, el 82 % de los costarricenses considera que los delitos han aumentado, mientras que el 72 % de los panameños opina lo mismo respecto a su país.

En tercer lugar está Nicaragua, nación donde el 55 % estima que hay más crimen y en cuarto Guatemala con un 54 %, mientras que al otro extremo está El Salvador, donde sólo el 3 % habla de un aumento de delincuencia.

En Honduras la medición indica que el 49 % habla de mayor crimen.

Curiosamente, Costa Rica y Nicaragua son 2 de los países donde históricamente hubo menos problemas de inseguridad, el primero por ser el “ejemplo y modelo a seguir” en la región con una sociedad con niveles educativos y culturales superiores a los de sus vecinos y en Nicaragua porque ha vivido como un “estado policiaco” por las dictaduras (Somoza hasta 1979, luego el sandinismo).

Costa Rica, que vive una ola de crimen inimaginable apenas hace una década, está afrontando una crisis vinculada al narcotráfico y este año será el más mortífero desde que se llevan registros (más de 700 homicidios hasta la última semana de octubre).

El caso de El Salvador, que para muchos es un fenómeno porque en poco tiempo pasó de ser el país más violento de Latinoamérica a volverse el de menos índice de asesinatos, hay una política de mano dura contra las pandillas y un régimen de excepción que le ha permitido al gobierno arrestar a casi 74,000 mareros.

En Latinoamérica, solo Perú y Ecuador (87 % cada uno) están por encima de Costa Rica. La medición corresponde a septiembre de 2023.

 

 

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