La condena en contra de dos ciudadanas francesas-nicaragüenses acusadas por la dictadura de Nicaragua de delitos de conspiración, desató condenas internacionales y este se convierte en el primer caso de sentencia carcelaria contra familiares de un perseguido político.
Los afectados por “la justicia” del régimen Ortega-Murillo son Jeannine Horvilleur Cuadra y Ana Carolina Álvarez Horvilleur, quienes fueron declaradas culpables de cometer “menoscabo a la integridad nacional y propagación de noticias falsas”. También fue condenado el nicaragüense Félix Roiz, esposo de Álvarez Horvilleur.
Defensores de derechos humanos han condenado la decisión judicial, la que califican de otro atropello más de parte de la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo.
“Las inéditas y graves condenas de ayer y hoy contra un sacerdote y tres familiares de un disidente, por menoscabo a la integridad nacional y propagación de noticias falsas, violan el debido proceso y confirman que la persecución en Nicaragua no tiene límites”, escribió el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos – América Central y República Dominicana, en su cuenta en Twitter.
El caso del religioso es el de Óscar Benavides, párroco en Mulukukú, en el Caribe Norte de Nicaragua, sentenciado a 8 años de cárcel también por conspiración.
“Dos mujeres francesas declaradas culpables de “conspirar y difundir noticias falsas” en Nicaragua. Detenidas arbitrariamente, juzgadas en secreto… son víctimas del régimen represivo de Daniel Ortega. ¡Esta situación es inaceptable!”, dijo vía Twitter Eleonore Cariot, diputada de la Asamblea Nacional Francesa.
“Acuso al régimen dictatorial y criminal… de haber encarcelado a dos mujeres francesas. Juzgados en secreto, condenadas injustamente”, escribió en Twitter la activista Bianca Jagger, una reconocida defensora de derechos humanos y reconocida crítica de la dictadura en la comunidad internacional.
Los sentenciados son familiares del opositor y perseguido político Javier Álvarez, un economista que se encuentra exiliado. Curiosamente, él fue sandinista y luchó contra el dictador Anastasio Somoza, que fue derrocado en 1979 por la guerrilla encabezada por Daniel Ortega.
Cuando la familia condenada fue arrestada, en agosto del año pasado en su casa, la policía a quien buscaba era a Álvarez, pero arremetió contra sus parientes, una táctica que se utiliza para golpear a quienes se oponen al régimen.