La dictadura de Daniel Ortega y su esposa y vicepresidenta Rosario Murillo en Nicaragua rompió récord en violación a los derechos humanos durante 2022, de acuerdo a un informe del Instituto sobre Raza, Igualdad y Derechos Humanos (Raza e Igualdad).
El mismo señala que fue el año con más clausuras de organizaciones no gubernamentales y que provocó un éxodo sin precedentes. Además, “es el segundo año con más casos de personas privadas de libertad por motivos políticos (más de 225) en el contexto de la crisis sociopolítica y de derechos humanos” desatada en abril de 2018.
En cuanto a la anulación de ONG, reporta que la gran mayoría de las más 3,000 que funcionaban en Nicaragua fueron clausuradas por Ortega.
Además, de los cientos de encarcelados por causas políticas solo les permitieron tres visitas de familiares, lo que interpretan como falta de voluntad para liberarles. “El régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo, a través del Ministerio de Gobernación y la Asamblea Nacional -dominada por el FSLN (Frente Sandinista de Liberación Nacional-, continúa implementando su política de tierra arrasada respecto de la libertad de asociación”, indicó esa ONG.