Un tercio de las universidades privadas nicaragüenses han sido clausuradas por la dictadura de Daniel Ortega en el último año y medio, según un informe de la organización Aulas Abiertas.
“Con estas nuevas 3 universidades afectadas, Aula Abierta ha documentado que, de 54 universidades privadas que estaban legalmente establecidas en el CNU en noviembre del 2021, 17 (31.48%) han sido despojadas arbitrariamente de su personería jurídica”, dice el informe de la organización no gubernamental que trabaja por la defensa de las universidades en Latinoamérica.
La semana pasada, la dictadura nicaragüense anunció la cancelación de la personería jurídica de otras tres universidades privadas: Universidad Metropolitana, Universidad del Norte de Nicaragua y Universidad Adventista de Nicaragua
“Lamentamos la continuidad de los ataques estatales contra la educación y libertad académica en Nicaragua”, dice Aulas Abiertas, que denuncia que “muchas otras asociaciones de Educación nacionales y extranjeras han sido despojadas de su personería”.
En febrero de 2022 inició el cierre de universidades por parte de la dictadura nicaragüense y en ellas se incluyó a la Universidad Católica Agropecuaria del Trópico Seco, Universidad Politécnica de Nicaragua (Upoli), Universidad Nicaragüense de Estudio Humanísticos (UNEH), Universidad Paulo Freire y Universidad Popular de Nicaragua (Uponic). En diciembre cerraron la Universidad Internacional de la Integración de América Latina (UNIVAL).
La Upoli fue clave en las protestas antigubernamentales de 2018.
Estatizar educación y transgredir libertad académica
Para Aulas Abiertas, la cancelación de estas personerías atiende a fines que -de facto- “buscan estatizar la educación superior para adoctrinar y controlar al sector académico del país, el cual ha tenido un rol fundamental en la crítica contra el gobierno nicaragüense desde 2018”.
“En Nicaragua existe una práctica de Estado dirigida a transgredir la libertad académica y atacar a los y las universitarias. Al menos desde el año 2018, Aula Abierta, ha documentado distintos patrones que demuestran esa premisa”, dice el informe que denuncia además, que las autoridades de universidades públicas permiten y en muchos casos promueven los actos de imposición ideológica y adoctrinamiento dentro de las universidades nicaragüenses.
“Aula Abierta ha documentado testimonios de miembros de la comunidad universitaria de Nicaragua que ha denunciado que en las universidades nicaragüense, especialmente las públicas, se restringe el pleno ejercicio a libertades y derechos fundamentales como la libertad académica, la libertad de expresión y el derecho a la reunión pacífica, pues al emitir opiniones críticas pueden ser blanco de represalias”, señalan.