La administración del presidente estadounidense Donald Trump ha intensificado las medidas contra la migración irregular con una nueva ruta de deportación que involucra la base naval de Guantánamo, en Cuba, como punto de tránsito previo al retorno de migrantes nicaragüenses hacia su país de origen.
Según informó el diario The New York Times, el primer vuelo de deportados nicaragüenses procedente de Guantánamo llegó al Aeropuerto Internacional Augusto C. Sandino de Managua el pasado 3 de abril, tras hacer escala en la base militar ubicada en la isla caribeña.
El vuelo, operado por la aerolínea Global X (Global Crossing Airlines), despegó inicialmente desde Alexandria, Luisiana, con 100 nicaragüenses detenidos en EE.UU. y posteriormente recogió a otros 44 en Guantánamo, sumando un total de 144 deportados.
La información fue verificada por el diario estadounidense a través de registros de vuelo de la plataforma especializada FlightAware.
Hasta ahora, el régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo no ha emitido ninguna comunicación oficial sobre la llegada de estos vuelos, manteniendo en reserva la información sobre los traslados y el trato a los repatriados.
La utilización de la base de Guantánamo para operaciones de deportación marca un nuevo giro en las estrategias migratorias impulsadas por la administración Trump, empecinada en deportar a 11 millones de migrantes.
Organizaciones defensoras de derechos humanos han expresado preocupación por el uso de instalaciones militares en procesos migratorios y por el silencio de las autoridades nicaragüenses ante la repatriación masiva de ciudadanos en condiciones de vulnerabilidad.