El costo en salud por el cambio climático se duplicará dentro de 25 años en la región

El BID calcula que el costo por desnutrición infantil, dengue y malaria, y estrés hídrico representará un 6.07 % del PIB regional en 2050.

El costo económico por la desnutrición infantil, el dengue y la malaria, así como el estrés hídrico, será de hasta 6.07 % del producto interno bruto (PIB) regional en 2050, el doble de lo que se espera para 2030 en un 3.4 %.

Este cálculo se desprende de un informe sobre el programa América en el Centro, publicado por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) en el marco de la 38ª Reunión de los Gobernadores, celebrada el 10 de febrero en la ciudad de Tela, en Honduras.

Según el informe, el cambio climático se considera el “mayor desafío de nuestros tiempos”, con un impacto directo en la salud de las personas que se refleja en la economía. En un capítulo dedicado a este tema, el BID presenta las estimaciones económicas basadas en la incidencia de desnutrición infantil, dengue, malaria y muertes por estrés térmico en Centroamérica y República Dominicana.

El BID señala una camándula de impactos indirectos por el cambio climático, como deficiencias nutricionales, diabetes y enfermedades cardiovasculares, mientras que los directos están vinculados con exposición a frío o calor, enfermedades respiratorias, infecciones, muerte por neoplasias o enfermedades diarreicas.

A partir de los modelos, en 2030 a la región le costará un 3.4 % del PIB el impacto en la salud por el cambio climático, de los cuales un 3.5 % corresponde a desnutrición infantil, un 0.32 % a dengue y malaria, y un 0.03 % por estrés térmico.

Todo será más severo en 2050

Ese costo subirá a 6.07 % para 2050, principalmente por un impacto más severo en la desnutrición infantil, estimado en 5.5 %l. El BID recuerda que la alteración de los patrones de temperatura y los eventos extremos tienen impacto en el rendimiento de los cultivos y la seguridad alimentaria, con mayor incidencia en los niños.

El dengue y la malaria costarán un 0.31 % del PIB regional dentro de 25 años, dos enfermedades transmitidas por vectores, que aumentan su reproducción a partir del cambio de temperaturas extremas.

Por su parte, el estrés hídrico tendrá un costo de 0.2 % del PIB regional. “Los mayores costos por mortalidad se observan en El Salvador (0.22 % del PIB), Guatemala (0.18 %), Belice (0.16 %) y Costa Rica (0.15 %)”, señala.

El BID indica que el impacto varía según la exposición de los países al cambio climático. “Belice y Honduras destacan por los niveles más altos de impacto económico total, que superan el 30 % de su PIB para 2030. Estos países muestran una contribución significativa tanto por el impacto macroeconómico como del gasto público, reflejando las altas pérdidas económicas y los crecientes costos gubernamentales para enfrentar la desnutrición”, añadió en el informe.

Para medir la magnitud de los costos, el BID utilizó la metodología basada en años de vida ajustados por discapacidad (DALY), que mide la carga total de la enfermedad a partir de años de vida perdidos por discapacidad. De esa manera, los países con alta desnutrición infantil, el DALY es significativo por se asocia con déficit cognitivos y enfermedades.

En 2030, se estima que el exceso de muertes por desnutrición infantil atribuidas al cambio climático será de 93,404, frente a 120.9 de dengue, 29.1 de malaria y 197.5 por estrés térmico.

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