En una operación en el municipio de San Andrés, Petén, el Ejército de Guatemala, a través de su Cuerpo de Ingenieros, inhabilitó tres pistas de aterrizaje clandestinas situadas en el Parque Nacional Laguna del Tigre.
Estas intervenciones marcan el inicio de las acciones del 2025 en la lucha contra el crimen organizado, un problema que afecta tanto la seguridad nacional como la biodiversidad del país.
El trabajo realizado por los especialistas del Cuerpo de Ingenieros consistió en la colocación de explosivos para crear grandes cráteres en las superficies de las pistas.
Esta medida, destinada a desactivar cualquier intento de aterrizaje no autorizado, es una respuesta directa a las amenazas vinculadas al narcotráfico y otras actividades ilícitas que se desarrollan en estas zonas remotas.
Primeras inhabilitaciones de pistas clandestinas del año 2025 🇬🇹🫡
Ejército de Guatemala a través del Cuerpo de Ingenieros realizó trabajos de inhabilitación de tres pistas clandestinas en el municipio de San Andrés, en el departamento de #Petén, en coordinación… pic.twitter.com/K0b8EOp5yV
— Ejército de Guatemala (@Ejercito_GT) February 28, 2025
Las pistas ilegales, por su ubicación estratégica en áreas protegidas, facilitan el tránsito de aeronaves involucradas en el tráfico de drogas y otras actividades delictivas.
El año 2024 cerró con un balance positivo, con un total de siete pistas inhabilitadas en distintas regiones del país. De estas, cuatro se encontraban en Petén, dos en San Marcos y una en Escuintla, destacando la continua presencia de organizaciones criminales que operan en diversas áreas del territorio guatemalteco.
Sin embargo, la inhabilitación de estas tres pistas en el Parque Nacional Laguna del Tigre marca el inicio de las acciones de 2025, con la firme intención de reducir significativamente el uso de estas instalaciones ilícitas.
El impacto de estas intervenciones no sólo recae en la lucha contra el crimen, sino también en la protección del medio ambiente.
El Parque Nacional Laguna del Tigre, una de las áreas más importantes de la biodiversidad guatemalteca, se ve amenazado por estas actividades ilegales, que ponen en peligro tanto los recursos naturales como a las comunidades cercanas.
La destrucción de estas pistas es una medida esencial para frenar el daño a este ecosistema invaluable.