Los gobiernos de Guatemala, Costa Rica, Panamá y Belice expresaron preocupación por la escalada bélica en Medio oriente y abogaron por una salida pacífica a los conflictos en la región.
“Guatemala manifiesta su profunda preocupación por la escalada bélica en el Medio Oriente y su más firme condena por los bombardeos con misiles por parte de Irán a Israel, así como los de Israel en el sur y este del Líbano. La guerra debe evitarse a toda costa y propiciarse la paz a todo nivel”, dijo el ministerio guatemalteco de Relaciones Exteriores en un comunicado.
Guatemala llamó a las partes involucradas a “respetar la vida de civiles y los principios básicos del Derecho Internacional Humanitario”.
“Es necesario desescalar tensiones y aplicar las Resoluciones pertinentes del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas. Ante la situación actual, el alto al fuego inmediato y permanente es absolutamente necesario para reducir la tensión regional y evitar más pérdidas humanas”, dijo la cancillería guatemalteca.
Por su parte, el Gobierno de Costa Rica se sumó a las manifestaciones de preocupación de la comunidad internacional por la crítica situación en Medio Oriente, “agravada por el ataque con misiles por parte de Irán a Israel, que lo involucra directamente y agrava el conflicto, así como por las acciones en el terreno en el Líbano”.
“Como país promotor de la paz, el diálogo, y el derecho internacional humanitario, se hace un llamado a todas las partes a evitar acciones que comprometan aún más los esfuerzos diplomáticos tendientes a buscar una solución pacífica al conflicto, que ya ha cobrado en la región miles de víctimas civiles y cuantiosos daños materiales”, dice el comunicado costarricense .
Costa Rica abogó por el diálogo, el cese al fuego y el respeto absoluto al derecho internacional humanitario, para “crear las condiciones propicias para que cese el sufrimiento de millones de personas y se retome la senda de la paz y estabilidad en la región y el mundo”.
En tanto Panamá expresó su plena solidaridad con el pueblo de Israel y dijo que “la continua amenaza a su soberanía y la seguridad de sus ciudadanos es profundamente preocupante”.
“Como nación firmemente comprometida con los principios de la paz, los derechos humanos y el respeto al derecho internacional y al derecho internacional humanitario, Panamá hace un llamado urgente a todas las partes involucradas, a que cesen el uso indiscriminado de la fuerza y a que ejerzan la máxima moderación”, dijo el comunicado panameño.
Por su parte, el gobierno de Belice dijo estar “ profundamente preocupado por la reciente escalada de muerte y destrucción que se está extendiendo desde los territorios palestinos de Gaza a Cisjordania y ahora al Líbano”.
“La creciente violencia contra los civiles provocada por el Estado de Israel, en particular mediante el uso de dispositivos civiles como buscapersonas para causar la matanza indiscriminada de civiles y el uso constante por parte de Israel de asesinatos selectivos, amenaza con desencadenar una conflagración a gran escala de consecuencias inimaginables”, dijo el gobierno beliceño que calificó el ciclo de violencia como “ ilegal, inmoral e inhumano”.
Según Belice, “nunca habrá paz en la región hasta que Israel acate las decisiones de las Naciones Unidas y respete plenamente el derecho del pueblo palestino a la libre determinación”.
No se han conocido pronunciamientos de Honduras, Nicaragua y El Salvador.